SANTANDER, 18 Jul. (EUROPA PRESS) -

El consejero de Economía y Hacienda, Ángel Agudo, acompañado del secretario general de la Consejería, Ricardo de Andrés, analizó hoy con los alcaldes de la comarca del Saja-Nansa el proyecto que tiene por objetivo aplicar tecnologías de última generación a la gestión eficiente del agua en los 15 municipios.

El proyecto, que se ha presentado para el programa europeo Interreg IV y que prevé una inversión de más de 3 millones de euros, será "la primera piedra de un edificio virtual para mejorar los servicios al ciudadano", según Agudo.

En nota de prensa, el Gobierno informó que durante el encuentro, el consejero explicó que el proyecto RIEGA, que ya se ha aplicado de forma pionera en Santillana del Mar, permitirá controlar las fugas de agua de la red de abastecimiento, con el consiguiente ahorro, y garantizar la calidad de las aguas en los términos que exige la normativa.

Para ello, se utilizará la red de conexión a Internet en banda ancha, puesta en marcha inicialmente por Cantabria en Red para dar servicio a los hogares, y una serie de enlaces inalámbricos con tecnología WIMAX y WIFI que permitirán obtener mediciones sobre los caudales y calidad de las aguas a través de equipos de radiocontrol colocados en puntos estratégicos.

No obstante, Agudo y de Andrés coincidieron en destacar que la gestión eficiente del agua es "uno" de los servicios que puede dar esta infraestructura tecnológica, ya que posteriormente se puede aplicar al control del alumbrado y de niveles de CO2, datos meteorológicos, e-administración, control de incendios, etcétera.

Además, el consejero explicó que el Gobierno de Cantabria pretende extender este proyecto a otras zonas rurales de la región, porque "permanecer alejado de las nuevas tecnologías implica limitar las capacidades de crecimiento de ese territorio".

PROYECTO RIEGA.

El proyecto de Red Inalámbrica de Enlaces para la Gestión y Ahorro del Agua (RIEGA), de dos años de ejecución, ya se ha presentado a la convocatoria de Interreg IV Sudoe y en caso de ser seleccionado contará con una aportación económica de la Consejería de 250.000 euros.

El proyecto está liderado por la Consejería de Economía, junto a la de Medio Ambiente, la Asociación de Desarrollo Rural Saja-Nansa, y la empresa pública para la gestión de Agua de Oporto. Colaboran además la Dirección General de Administración Local, la de Transporte y Comunicaciones, el Instituto Hidráulico de la Universidad de Cantabria, y la Fundación para el Desarrollo Sostenible y las Nuevas Tecnologías.

Agudo, que "ve muchas posibilidades de éxito al proyecto", destacó su contribución a los objetivos de la Estrategia de Lisboa, al suponer una aportación a la cohesión y el equilibrio territorial en materia de competitividad y desarrollo, además de contribuir a la protección del medio ambiente, conforme a las Orientaciones Estratégicas Comunitarias, y a reducir la brecha digital incorporando zonas rurales a la Sociedad de la Información.

250 NUCLEOS RURALES CON INTERNET.

El titular de Economía recordó que este proyecto "no es una ocurrencia", sino que el resultado de un largo recorrido de cinco años desde que la Consejería puso en marcha Cantabria en Red y comenzó a trabajar por la conectividad de las zonas rurales para reducir al máximo las áreas de sombra en la región.

En la actualidad hay 250 núcleos rurales con conexión a Internet, normalmente a través de redes inalámbricas, que no eran atendidos por los operadores por su dispersión o escasa población.

El consejero señaló la importancia que tienen las nuevas tecnologías en el ámbito rural, al ser un importante componente para el desarrollo económico, dando servicios a establecimientos hoteleros, turísticos, etcétera, además de fijar población, abrir posibilidades de nuevos negocios en esas zonas.