El Gobierno subveciona con 200.000 euros la instalación de nuevas calderas domésticas

SANTANDER 4 Oct. (EUROPA PRESS) -

La Consejería de Innovación, Industria, Turismo y Comercio ha publicado este viernes en un Boletín Oficial de Cantabria extraordinario la orden por la que aprueba la convocatoria para el año 2013 de las subvenciones al ahorro y la eficiencia energética en los hogares, por la que destina un total de 200.000 euros para ayudas a la instalación de nuevas calderas.

Esta convocatoria de subvenciones a fondo perdido pretende incentivar en las instalaciones térmicas el uso de la mejor tecnología disponible y el mayor respeto al medio ambiente.

La cuantía total de la subvención por la instalación de una nueva caldera, siempre que se cumplan los requisitos exigidos en la orden, será de 400 euros en el caso que la nueva caldera que se instale sea de condensación de gas; 700 euros, si es de condensación de gasóleo; y 1.000 euros, si es de biomasa granulada o de biomasa con gasificación de la leña.

Podrán beneficiarse de las subvenciones las personas físicas e instituciones sin ánimo de lucro, incluidas las comunidades de bienes, que sean propietarias, usufructuarias o arrendatarias de la vivienda donde se realiza la instalación para la que se solicita la subvención.

El plazo para la presentación de solicitudes esta abierto hasta el 31 de octubre y se subvencionan las calderas compradas e instaladas entre el 1 de septiembre y el 31 de octubre del actual año en curso.

El objetivo de esta orden es promover la instalación de calderas domésticas más eficientes, seguras y ecológicas en viviendas ya construidas, e incentivar el uso de equipos basados en la mejor tecnología disponible actualmente en el mercado para conseguir un aprovechamiento más eficiente de la energía, cumpliendo con los rendimientos de confort esperados.

También se pretende promover un mayor respeto al medio ambiente y contribuir a la reducción de las emisiones de gases contaminantes mediante el ahorro en el consumo de combustible o a la utilización de biomasa como combustible.

De esta manera se incentiva la instalación, en viviendas ya construidas, de calderas de condensación que utilicen como combustible gas natural, gases licuados del petróleo (GLP), calderas de condensación que utilicen como combustible gasóleo, calderas de biomasa granulada (Tipo pellets o similares), y calderas de biomasa que incorporan un sistema de gasificación de leña.

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