SANTANDER, 7 Jul. (EUROPA PRESS) -
Alrededor de 10.400 trabajadores cántabros han sufrido algún accidente laboral o en los desplazamientos a su trabajo en el último año. La mayor parte de los siniestros --más del 80 por ciento-- se registraron en el propio puesto de trabajo, aunque en función del sexo varía la proporción.
Así se plasma en el módulo de siniestralidad laboral y enfermedades profesionales 2007 de la Encuesta de Población Activa (EPA) publicado hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE) y recogido por Europa Press, según el cual, siete de cada diez trabajadores víctimas de accidente laboral en la región en el último año eran hombres. Así, de los 10.400 trabajadores afectados, 7.000 fueron varones y 3.300 mujeres.
De la cifra total de afectados, 8.500 sufrieron un accidente durante la jornada laboral, 1.700 lo sufrieron en los trayectos y los 200 restantes sufrieron dos o más accidentes en trayectos.
En términos relativos esto supone que el 82,06 por ciento de los accidentes se producen en el puesto de trabajo y, el resto, en los desplazamientos.
En los hombres, el porcentaje de accidentes en jornada laboral es aún mayor, al elevarse hasta el 84,71%, frente a un 15,29% en los trayectos. Mientras tanto, en el caso de las mujeres el 76,5% de los accidentes fueron en el puesto de trabajo y el resto (algo más del 23%) en los trayectos.
Por lo que respecta a enfermedades profesionales, el pasado año en Cantabria 72.700 personas (ocupadas o que han trabajado con anterioridad) sufrieron una enfermedad ocasionada o empeorada por su actividad laboral.
En el 24,23% de los casos (unas 17.600 personas) el trabajo fue la causa de la enfermedad, un porcentaje al que se une el 2,67% de los afectados (1.900 personas), que sufren dos o más enfermedades provocadas por el trabajo. En cuanto al 73 por ciento restante (53.100 personas) el origen de la enfermedad no fue el trabajo.
