SANTANDER, 24 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Asociación para la Defensa de los Intereses de Cantabria (ADIC) ha manifestado su indignación por la actitud del PP y el PRC ante el proyecto de reforma del Plan de Ordenación del Litoral (POL) tramitado desde el Parlamento de Cantabria puesto que éste supondrá "el tiro de gracia a un litoral cántabro, prácticamente aniquilado por el ladrillo salvaje".
En un comunicado, ADIC ha denunciado que el modelo socioeconómico de Cantabria en las últimas décadas, basado en la especulación inmobiliaria y el "caos" urbanístico, ha supuesto "un absoluto fracaso" desde el punto de vista económico, laboral y de la conservación del patrimonio.
"Gracias a este modelo, impropio de una sociedad mínimamente formada y sensibilizada, Cantabria reincide en su papel de autonomía contracorriente dentro de su contexto geográfico y cultural", denuncia la asociación.
En este sentido, ADIC lamenta que Cantabria sea la única comunidad del Cantábrico que no conserva ni una sola villa marinera "con un mínimo de dignidad estética". Lo que, a su juicio, es "causa fundamental" de que la región registre las peores cifras turísticas del litoral Cantábrico, tanto en términos absolutos como relativos, ya que actualmente se impone la conservación y potenciación de la arquitectura histórica y autóctona como valor cultural y turístico.
Para la asociación, es "cruel" comparar Luanco, Navia, Cudillero, Tazones, Lekeitio, Pasajes, Getaria u Hondarribia con Isla, Noja, Suances, Mogro, Ajo, Cerrias o Castro Urdiales.
A su juicio, que los políticos "reincidan en un sector tan dañino" revela su "incapacidad manifiesta a la hora de estructurar con rigor una economía cántabra". "Tras décadas de darle la espada a la industria, se la sustituyó por un sector especulativo, empobrecedor, estéticamente degradante y basado en el enriquecimiento fácil pero caduco. Y de este fenómeno ha sido cómplice la totalidad de la clase política de Cantabria", denuncia.
Según ADIC, "llegará un día en que nadie sabrá que Cantabria fue tierra de marineros y pescadores, ante la presencia omnipresente de especuladores sin escrúpulos".
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