Cree que los abucheos contra Zapatero se produjeron en momentos "especialmente inapropiados"
MADRID/SANTANDER, 13 Oct. (EUROPA PRESS) -
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, no se ha querido pronunciar sobre el incidente que protagonizó ayer con la esposa del presidente cántabro, Aurora Díaz. Al ser preguntada sobre qué ocurrió con Díaz, ha respondido: "no tengo absolutamente ni idea".
También ha asegurado que los abucheos y pitidos dirigidos contra el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, durante el desfile militar con motivo de la Fiesta Nacional se produjeron "en momentos especialmente inapropiados e inadecuados", ya que llegaron en el homenaje a los caídos.
"Yo siempre estoy en contra de los abucheos, de todos aquellos que se producen. Es verdad que los políticos tenemos la obligación de aguantarlos. A mí me pasa en muchas ocasiones", ha explicado tras inaugurar centro escolar en Las Rozas.
La dirigente regional ha considerado que este año se ha querido "restar protagonismo" al desfile, "suprimiendo tribunas, suprimiendo el público, poniéndolo muy alejado y detrás de unas verjas, alegando motivos de seguridad" que, a su juicio, "no pueden ser ciertos porque otros años no han existido".
Aguirre ha desvelado que "mucha gente" de su Secretaría, así como diputados, pidieron entradas para ver el desfile pero "no dieron a nadie". "Decían que se habían reducido el espacio pero estábamos en el mismo sitio que el año pasado y probablemente, como la gente estaba tan lejos, pues esos pitidos se produjeron en momentos especialmente inapropiados e inadecuados porque también se habían suprimido las pantallas y la gente a lo mejor no oía bien", ha razonado.
Finalmente, ha señalado que las Fuerzas Armadas son la institución "más valorada" por los españoles, por lo que ve oportuno que se la enaltezca y se procure que "vaya un poco mejor" año a año.