Despedida multitudinaria a Alberto Pico, "un padre y un maestro"

Funeral por el párroco Alberto Pico en el Barrio Pesquero
EUROPA PRESS
Actualizado: miércoles, 4 junio 2014 14:21

Más de 30 sacerdotes acompañaron al obispo en una iglesia abarrotada

SANTANDER, 4 Jun. (EUROPA PRESS) -

El Barrio Pesquero de Santander ha despedido este miércoles al sacerdote Alberto Pico, con un funeral multitudinario que ha presidido el obispo, Vicente Jiménez Zamora, y en el que han sido muchas las personas que se han quedado sin poder entrar en la abarrotada iglesia de Nuestra Señora del Carmen, desbordada de personas que querían, con su presencia, manifestar su agradecimiento y cariño al párroco.

Jiménez Zamora, al que han acompañado más de 30 sacerdotes de la Diócesis, ha definido a Alberto Pico como "un sacerdote bueno, humano y cercano a la gente; y preocupado siempre de las necesidades de los vecinos del Barrio Pesquero y de la ciudad de Santander, especialmente de los más pobres". "Ha muerto un padre y un maestro en el campo social y educativo", agregó.

El obispo ha encomendado su alma a la Virgen del Carmen, patrona de los pescadores "y a quien tanto quería Alberto Pico".

Entre las autoridades que han acudido al funeral estaban el presidente de Cantabria, Ignacio Diego, el delegado del Gobierno, Samuel Ruiz, y el presidente del Parlamento, José Antonio Cagigas. También el consejero de Cultura, Miguel Angel Serna, el presidente de la Autoridad Portuaria, José Joaquín Martínez Sieso, y el director general de Turismo, Santiago Recio, así como representantes de la Guardia Civil y la Marina Mercante.

A pesar de la lluvia, muchos vecinos y amigos se congregaron dentro y fuera del templo; personas de todas las edades y lugares de procedencia, y también muchos niños, que permanecieron sentados alrededor del altar durante la misa. Numerosas coronas y ramos de flores rodeaban, igualmente, el presbiterio.

El oficio ha comenzado a las 11 de la mañana, y pese a que a los pocos minutos ha empezado a llover con intensidad, las personas que seguían el funeral desde la calle han permanecido en los alrededores a la espera de poder dar su último adiós a quien ha sido un referente durante décadas en el Barrio Pesquero por su labor social.

Algunos vecinos que sí han conseguido acceder a la iglesia han tenido que irse antes de acabar el funeral para volver a sus trabajos, al encontrarse en horario laboral.

"MAESTRO, AMIGO Y REFERENTE"

El presidente de Cantabria ha destacado que Alberto Pico "ha marcado carácter" en Santander y Cantabria, y ha sido para varias generaciones de personas "un maestro, un amigo y un referente". "Hoy se ha demostrado en el funeral, donde la gente estaba sinceramente afectada pero con la serenidad que da la lección bien aprendida de un buen maestro", ha afirmado Diego en declaraciones a la Ser recogidas por Europa Press.

Alberto Pico, que ha sido enterrado en el cementerio de Ciriego, nació en La Habana (Cuba) el 27 de septiembre de 1931, aunque llegó a Cantabria siendo muy joven. Se ordenó sacerdote el 29 de junio de 1956 tras lo que ocupó diversos puestos en iglesias de la Diócesis de Santander.

Antes de llegar en 1971 a la Parroquia de Nuestra Señora del Carmen del Barrio Pesquero, donde desarrolló una gran labor por la que ha sido reconocido en numerosas ocasiones, recaló en diferentes municipios de la región como coadjutor.

Así, su primera parada fue Laredo y después estuvo en las parroquias de Secadura y San Mamés de Aras, en el municipio de Voto. Además, Alberto Pico fue capellán de la Marina Mercante.

Este emblemático cura llegó al Barrio Pesquero en 1971 como coadjutor, donde a lo largo de sus años como párroco desarrolló una importante labor social y educativa que le convirtió en un referente entre los vecinos de esta zona de Santander.