Fiscalía pide 12 años para el expedáneo de Sámano, 11 para su mujer y 6 para el extesorero

Actualizado: viernes, 14 febrero 2014 21:13

Fiscalía pide 12 años para Eguren, 11 para su esposa y seis para el extesorero de la Junta Vecinal, Ignacio Berriolope

SANTANDER, 14 Feb. (EUROPA PRESS) -

El juez Luis Acayro Sánchez ha ordenado la apertura de juicio oral contra el exalcalde de Sámano, Javier Eguren; su esposa, Iratxe Sánchez Tobalina; y el extesorero de la Junta Vecinal, Ignacio Berriolope, por varios delitos continuados de prevaricación administrativa, malversación de caudales públicos, y falsedad documental.

La Fiscalía solicita 12 años de cárcel para Eguren, 11 para Sánchez Tobalina y seis para Berriolope, como responsables del "estado delictivo generalizado" detectado, a nivel indiciario, en la gestión de la Junta Vecinal de Sámano, que ha ocasionado un "grave quebranto" al patrimonio municipal, así como un "lucro personal relevante" a los acusados, "bien mediante el desvío directo de fondos públicos para el disfrute personal o mediante la simulación de actos administrativos para crear una apariencia de legalidad".

Así consta en un auto del titular del Juzgado de Instrucción nº2 de Castro Urdiales, recogido por Europa Press, que "comparte íntegramente la valoración realizada por el Ministerio Fiscal", declara como órgano competente para el enjuiciamiento de esta causa la Audiencia Provincial y fija fianzas por importe de 269.223 euros para Eguren, 86.877 euros a su mujer y 68.484 euros al extesorero. El importe de las fianzas equivale "al importe de las cantidades desviadas para lucro personal incrementado en un tercio".

Este auto, contra el que cabe recurso de reforma en tres días o de apelación en cinco, es continuación del dictado en noviembre, en el que el juez Acayro Sánchez imputó a Eguren por saltarse la legalidad al adjudicar obras y por "lucrarse" a través de varias vías durante su mandato como presidente de la Junta Vecinal (por el PSOE), durante el que contrató a su mujer como cargo de confianza y asignó un sueldo a Ignacio Berriolope, vocal del PSOE, de su mano mayor.

El titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción nº2 de Castro Urdiales, que en noviembre cuantificó la malversación en 202.000 euros, imputó también a Berriolope y Sánchez Tobalina como "inductores y cooperadores necesarios", entre otras cosas por las nóminas que cobraron sin que hubiera un acto administrativo que lo respaldara y por el aumento de sueldo que pidieron a Eguren en 2010 cuando el Estado aprobó reducir un cinco por ciento la nómina de los empleados públicos.

Según la instrucción, Eguren (que tras abandonar el PSOE se presentó a la Junta Vecinal de Sámano por el PRC en las últimas elecciones), se "lucró" durante su mandato a costa de fondos públicos mediante tres vías.

La primera de ellas ordenando verbalmente a la gestoría incrementar su nómina sin justificación alguna y muy por encima de lo aprobado en los presupuestos, lo que le reportó 20.340 euros adicionales; la segunda utilizando dinero público para uso particular propio o de su mujer en comidas (37.143 euros), cestas de Navidad (10.036 euros); dispositivos electrónicos y ordenadores (8.893 euros); y varios productos comprados en centros comerciales con cargo a la tarjeta de crédito de la junta (6.370 euros).

Y la tercera, contratando a nombre de la junta un teléfono móvil para su cónyuge, que acumuló un gasto de 10.963 euros, y autorizando el uso de otros dos a personas ajenas a la junta, cuyas facturas sumaron 4.465 euros.

CONTRATOS

Además, Eguren también habría incurrido en prevaricación administrativa por adjudicar contratos al margen de la legalidad para justificar la subvención nominativa de 913.000 euros que la Junta Vecinal recibió en mayo de 2008 para inversiones, mediante adjudicación directa y fraccionamiento "artificioso y sucesivo" para que tuvieran apariencia de contratos menores. Además, algunos contratos no tenían nada que ver con la subvención recibida ni se ha realizado la justificación preceptiva.

A raíz de recibir esta subvención, Eguren decide contratar a su mujer como cargo de confianza y asignar un sueldo al vocal y tesorero, Ignacio Berriolope, entonces compañero de partido, pero no consigue su objetivo "de forma legal" al rechazar el Pleno los presupuestos, por lo que decide "imponer su propia voluntad" al margen del procedimiento legal preceptivo, "abusando de su condición de alcalde y en connivencia" con el tesorero, cuya firma era preceptiva para realizar cualquier pago.

De esta forma, Sánchez Tobalina y Berriolope reciben su primera nómina en diciembre de 2008, llegando a percibir hasta el final de la legislatura -junio de 2011- algo más de 54.000 y 51.000 euros, respectivamente.

En julio de 2010, cuando entró en vigor la reducción del cinco por ciento del sueldo de todos los empleados públicos a nivel nacional, Eguren decide, a petición de ambos, incrementarles el sueldo cerca de un 25% sin dar cuenta al Pleno, de nuevo a través de una orden verbal a la gestoría que hacía las nóminas. De esta forma, pasaron de cobrar 1.010 euros al mes a consolidar 1.200 euros.

En el caso de Sánchez Tobalina, se "manipula" la nómina incluyendo conceptos aleatorios que no se ajustaban a la realidad y sin justificación alguna, "lo que permitía incrementar el desvío de dinero público a favor de la misma porque la nómina no respondía a otra realidad que permitir el desvío de fondos públicos mediante una pretendida apariencia de legalidad".