Biodiversidad acota temporalmente las parcelas afectadas por incendios forestales

Actualizado: lunes, 17 agosto 2009 14:04

Esta decisión afectará a sus propietarios, ya que les impedirá la percepción de ayudas europeas de los fondos FEAGA y FEADER

SANTANDER, 17 Ago. (EUROPA PRESS) -

El Boletín Oficial de Cantabria (BOC) publica hoy una resolución de la Dirección General de Biodiversidad del Gobierno regional por la que se acota temporalmente, hasta el 31 de diciembre de 2010, a los efectos de percepción de ayudas financiadas por los fondos europeos FEAGA y FEADER, el pastoreo en las parcelas SIGPAC (Sistema de Información Geográfica de Parcelas Agrícolas), afectadas por incendios forestales.

El objetivo de esta medida es acotar terrenos y evitar el aprovechamiento forestal, especialmente el de pastoreo, incompatible con la regeneración de masas forestales, en aquellos terrenos que han sufrido los efectos de un incendio.

En la resolución de la Consejería de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca y Biodiversidad se recuerda que tanto la legislación española como la europea establecen criterios de condicionalidad a las ayudas directas que se conceden a los agricultores y ganaderos.

Así, el cumplimiento de buenas prácticas agrarias es uno de los requisitos "indispensables" para la concesión de dichas ayudas, por lo que se deberá excluir la superficie incendiada de las ayudas ligadas al territorio.

Por su parte, la Ley de Montes establece que será la Comunidad Autónoma la encargada de fijar las medidas para la retirada de la madera quemada y la restauración de la cubierta vegetal afectada por los incendios, que, en todo caso, incluirán el acotamiento temporal de aquellos aprovechamientos o actividades incompatibles con su regeneración y, en particular, el pastoreo, por un plazo que deberá ser superior a un año, salvo levantamiento del acotado por autorización expresa de dicho órgano.

QUEMAS DE MATORRAL

Según se indica en la resolución publicada hoy, la práctica tradicional de quemas incontroladas de sistemas de matorral con objeto de favorecer la regeneración y el nacimiento de pastos frescos y nuevos para el ganado se encuentra "muy arraigada" en el medio rural cántabro, constituyendo "la principal causa" de incendios forestales.

Así, anualmente, se producen una media de 336 incendios calcinando una superficie de 3.810 hectáreas. El 86% son intencionados, generalmente como consecuencia de la quema de pastizales. Los incendios forestales suponen "una de las mayores amenazas" a la persistencia de los ecosistemas naturales, según se advierte en la Resolución del Ejecutivo.

A ello se suma el hecho de que los impactos sociales o ambientales generados por los incendios forestales son "de difícil cuantificación". Sin embargo, la sociedad es "cada vez más consciente de la magnitud de dichos impactos", por lo que reclama medidas encaminadas a la erradicación de los mismos.