SANTANDER, 30 Mar. (EUROPA PRESS) -
La caída de uno de los silos que se están levantando para la terminal de graneles agroalimentarios del Puerto de Santander no afectará al ritmo de las obras, que terminarán a finales de este año tal como estaba previsto.
Según ha explicado a Europa Press el responsable de la empresa concesionaria (TASA), Álvaro Barrio, el incidente ocurrió durante el fin de semana, cuando no se trabajaba en las obras, así que no hubo heridos.
Se cree que el silo se pudo desplomar la noche del sábado al domingo, porque el domingo fue cuando se vio que se había caído. Y en cuanto a las causas, se desconocen exactamente, pero "probablemente" fuera una "racha de aire fuerte".
El suceso ha afectado a uno de los silos pequeños, con capacidad para guardar hasta 500 toneladas de mercancía, aunque de momento no estaba en uso, porque siguen las obras.
Tras la caída, el silo ha quedado "inservible", pero no ha provocado daños en el resto de la terminal y, además, no habrá problema para reponerlo.
En palabras de Barrio, en dos o tres meses podría tenerse ya el repuesto, con lo cual, no se retrasarán las obras de la terminal, que se espera que esté terminada a finales de este año, hacia el 30 de noviembre.