Los cántabros puntúan con un 6,8 sobre 10 su satisfacción global

Cantabria es la comunidad con menos confianza en el sistema político y más en las personas y en la seguridad

Gente pasenado por la playa en Santander
EUROPA PRESS
Europa Press Cantabria
Actualizado: viernes, 20 junio 2014 13:39

SANTANDER, 20 Jun. (EUROPA PRESS) -

La satisfacción global de la población cántabra con su vida es la cuarta más baja del Estado, al situarse en 6,8 puntos en una escala de cero a 10, una décima menos que la del conjunto del país, según la encuesta de condiciones de vida correspondiente al año 2013 que publica este viernes el Instituto Nacional de Estadística (INE).

De acuerdo con esta encuesta, una operación de periodicidad anual que se realiza de forma armonizada en todos los países de la Unión Europea, la satisfacción de los cántabros con el trabajo actual es la más elevada del país (7,1 cuando la media es de 6,9), y la sexta más alta con la vivienda (7,4).

Sin embargo, respecto a la situación económica, la satisfacción de Cantabria es la octava más baja de España (5,7), y la comunidad se mantiene en la media respecto a la satisfacción con las relaciones personales (7,8).

Las comunidades autónomas con mayor satisfacción global con la vida son Baleares y Comunidad Foral de Navarra. Por su parte, Galicia y Castilla y León son las que muestran menor satisfacción global con la vida. Para el conjunto estatal, la satisfacción global de la población con su vida se sitúa en 6,9 puntos.

Por su parte, la confianza en el sistema político se sitúa en Cantabria en un 1,5, la más baja de España y similar a la de la comunidad gallega.

Sin embargo, Cantabria lidera tanto la confianza en las demás personas (6,7) como en la seguridad (88,1%).

En cuanto a confianza en la policía, la nota es de 5,5, una décima por encima de la media, mientras que la confianza en el sistema judicial se sitúa una décima por debajo del conjunto del país (3 frente a 3,1).

RIESGO DE POBREZA Y CARENCIA MATERIAL

Estadística refleja que la tasa de riesgo de pobreza es del 17,8 en Cantabria, por debajo de la media (20,4). Mientras, la tasa de riesgo de pobreza o exclusión social (estrategia Europa 2020) se eleva al 25,3 --dos puntos por debajo de la media--, con una tasa del 17,8 en riesgo de pobreza y del 3,9 de carencia material severa. Además, un 11,1% de la población está viviendo en hogares con baja intensidad en el trabajo.

En cuanto a carencia material, el INE señala que un 53,2% de las personas en Cantabria no pueden permitirse ir de vacaciones al menos una semana; un 33,2% no tiene capacidad para afrontar gastos imprevistos; y un 7,7% ha tenido retrasos en el pago de gastos relacionados con la vivienda principal (hipoteca o alquiler, recibos de gas, comunidad...) en los últimos 12 meses.

Además, un 3,7% no puede permitirse mantener la vivienda con una temperatura adecuada, ni un ordenador personal. Y un 3% no puede permitirse una comida de carne, pollo o pescado al menos cada dos días. Mientras, un 2% de las personas en Cantabria no puede permitirse disponer de un automóvil.

Respecto a hogares de Cantabria que sufren determinados problemas en la vivienda y su entorno, un 3,4% de ellos tienen escasez de luz natural, un 15,5% padecen ruidos producidos por vecinos o del exterior, un 6,6% contaminación y otros problemas ambientales, un 6,3% sufren delincuencia o vandalismo y un 75,9% no presentan ningún problema.

Esta encuesta de condiciones de vida, además del cuestionario principal, todos los años incorpora un módulo adicional para investigar aspectos destacados de las condiciones de vida.

DATOS NACIONALES

La satisfacción global de la población española con su vida se sitúa en 6,9 puntos en una escala de cero a diez. En concreto, un 63,6% de la población valora su satisfacción global con la vida entre los siete y los diez puntos, un porcentaje que se eleva al 73,1% entre la población de 16 a 29 años, frente a un 9,7% que la valora de cero a cuatro puntos, por lo que la puntuación media es de 6,9 puntos.

La satisfacción global con la vida es mayor en la personas con los ingresos por hogar más altos y con el nivel de formación más elevado. Así, el 77,7% de las personas que viven en hogares con ingresos elevados valoran de siete a diez su satisfacción global con la vida, y el 4,6 % da una valoración de cuatro o menos puntos. Por el contrario, el 49,5 % de las personas con nivel de formación de primaria o inferior hace una valoración de siete a diez puntos y el 15,9% de cero a cuatro.

Por otro lado, las personas de 65 y más años son, en general, las que se consideran más satisfechas con el tiempo del que disponen para hacer lo que les gusta, frente a las personas de 30 a 44, que son las que declaran menor grado de satisfacción. El grupo más insatisfecho con el tiempo disponible es el de la población ocupada (el 24% valora su satisfacción entre cero y cuatro puntos).

En la misma línea, la satisfacción media con el trabajo se sitúa en 6,9 puntos, siendo las personas más satisfechas las de 65 y más años (7,4 de valoración media). En cambio, la población con menor nivel de ingresos en el hogar presenta el mayor porcentaje de personas insatisfechas con el trabajo (17,4% puntúan su satisfacción entre cero y cuatro). Por sexos, la satisfacción con el trabajo es mayor entre las mujeres que entre los hombres.

Además, las personas con mayor nivel de ingresos son las que en mayor porcentaje se declaran satisfechas con la situación económica de su hogar (un 67,6% da una valoración de siete a diez), seguidas de las que tienen formación superior (54,4% con valor siete a 10). Por el contrario, un 49,0% de las personas en paro declaran un grado de satisfacción de cuatro puntos o menos.

Mientras, las personas más satisfechas con su vivienda son las que tienen mayor nivel de ingresos (un 82,7% dan una valoración de siete a diez puntos) y las que tienen formación superior (76,8% con valoración siete a 10), frente a los extranjeros de países distintos de la Unión Europea, que presentan un porcentaje del 18,1% con valoración de entre cero a cuatro puntos.

La encuesta también analiza la confianza en el sistema político, el sistema judicial y la policía. En el primer caso, recibe una valoración media de 1,9 puntos, confianza que en el sistema judicial se eleva a una valoración media de 3,1 y la de la policía se valora en un 5,4.

La encuesta aborda asimismo la percepción de la seguridad, con diferencias entre sexos ya que el 43,8% de los hombres manifiesta sentirse muy seguro, porcentaje que se reduce a la mitad (21,5%) en el caso de las mujeres. Por edades también surgen diferencias pues el 10,4% de las personas de 65 y más años se declaran muy inseguras, frente al 3,3% de jóvenes entre 16 y 29.

En cuanto al grado de satisfacción global de los entrevistados con sus relaciones personales, la población de 16 a 29 años es la más satisfecha, con una valoración media de 8,1 puntos. En cuanto a la confianza en los demás, destacan los jóvenes de 16 a 29 años, con una valoración media de 6,6 puntos.

Por CC.AA., Melilla, Islas Balears y la Comunidad Foral de Navarra destacan por la valoración global de la vida mientras Galicia, Castilla y León y Andalucía alcanzan unas valoraciones medias más bajas. La Comunidad Foral de Navarra es dónde la población manifiesta mayor satisfacción con su situación económica y también es en la que se tiene más confianza en los demás.

Islas Balears destaca en la valoración de la vivienda y la ciudad de Melilla alcanza la mejor valoración de dos de las tres instituciones valoradas y en la satisfacción con el trabajo actual. En la valoración de la satisfacción con las relaciones personales destaca Ceuta mientras que Cantabria tiene el mayor porcentaje de población que se considera segura (88,1%).

En Galicia se da la peor valoración en situación económica, vivienda, trabajo actual, instituciones (junto con País Vasco), confianza en los demás, relaciones personales, y valoración global de la vida. Ceuta es la peor situada en cuanto a seguridad percibida.

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