Condenan a indemnizar con 140.000 euros a la familia de un hombre que falleció arrollado por un caballo en Suances

Actualizado: martes, 27 marzo 2007 19:54

SANTANDER, 27 Mar. (EUROPA PRESS) -

La Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Cantabria ha condenado a la aseguradora Allianz, como responsable civil, a indemnizar con 140.000 euros a la familia del catalán Francisco Ríos Robles, que falleció en julio de 2001 tras ser arrollado por un caballo en el Derby de la Playa de Suances.

La sentencia modifica el fallo judicial emitido en primera instancia, ya que aumenta la indemnización a la viuda y los tres hijos de los iniciales 99.000 euros a los 140.000 euros, más los intereses legales, además de que absuelve al jinete y al propietario del caballo que causó el fatal accidente.

Los hechos se remontan al 28 de julio de 2001, cuando dos personas que se encontraban presenciando el Derby de Suances fueron arrolladas por uno de los caballos participantes en la prueba que se escapó del control del jinete al tomar una curva muy cerrada.

Francisco Ríos Robles, que tenía 45 años, natural de Barcelona, casado y con tres hijos, falleció el 2 de agosto mientras dormía, en un repentino fallo del corazón, tras haber sido operado de las lesiones que presentaba.

La indemnización está fijada en 240.000 euros, pero dado que ya se han abonado 100.000 euros, en parte por el Club Deportivo Elemental Carreras de Caballos de Cantabria, Allianz tendrá que hacer frente a los 140.000 restantes, concretamente, 61.800 euros a la viuda y 25.763 para cada uno de los tres hijos.

Según expone la Sala, el Ayuntamiento de Suances "hizo mal" las "funciones de prevención", pues "no adoptó las medidas" dirigidas a "abortar ese incremento del riesgo", como "colocar vallas y no meras cintas, alejar a los bañistas o impedir su estancia". "No olvidemos que policías locales, precisamente, ejercían en nombre del Ayuntamiento", añade la sentencia.

No obstante, la condena por responsabilidad civil no se dirige contra el Ayuntamiento, sino contra la aseguradora, absolviendo también tanto al jinete como al propietario del animal.