La entrega de terroristas por Francia se ha multiplicado por 18 desde 2000

El juez español de enlace en materia antiterrorista con Francia, Manuel García-Castellón, destacó esta mañana la colaboración de París en materia antiterrorista y puso como ejemplo el importante aumento de entregas anuales de miembros de ETA a España, que se han multiplicado por 18 desde el inicio de la presente década.

Así, si en 2000 Francia acordó la entrega de 10 miembros de la banda, cinco años más tarde la cifra ascendió a 180 y, según García-Castellón, desde entonces la cifra se mantiene cada año "más o menos" en esos niveles. No obstante, en muchos de los casos, deben terminar de cumplir su condena en Francia antes de ser entregados físicamente.

Durante su intervención en el curso 'Justicia y terrorismo', en el marco de los cursos de verano de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), el magistrado español atribuyó este incremento a la puesta en marca de la orden europea de detención y entrega, conocida como euro-orden, a la que calificó como "una auténtica revolución" que les hizo "ver la luz".

Junto a García-Castellón intervino la fiscal antiterrorista francesa Fanny Bussac, quien repasó los cambios y avances que se han ido registrando en los últimos años en la colaboración entre Francia y España en la lucha contra el terrorismo, pero también reconoció que siguen existiendo "diferencias de cultura judicial" y en algunos casos "falta de medios", como en otros ámbitos.

Aún así, Bussac aseguró que "ETA es un problema común" de Francia y España y eso "explica" que se haya desarrollado entre ambos países una "colaboración estrecha" que representa un "modelo para el resto de Europa".

Dentro de esa colaboración el magistrado español incidió especialmente en los resultados de la euro-orden, que funciona "extraordinariamente bien", y lo contrapuso con el "tortuoso" camino que seguían hasta entonces las extradiciones, en el que muchas veces "se perdía" la labor policial.

Así, recordó que tras las detenciones de etarras en territorio francés los abogados de la banda pedían informaciones complementarias y en lo que se tramitaban esas peticiones desde las autoridades francesas a las españolas, cuando llegaban al juez de instrucción español "la mitad de las veces" había vencido ya el plazo dado por el juez francés para remitir la información o quedaba apenas una semana para recabarla y recorrer el mismo camino de vuelta, con lo cual, el día de la vista no había llegado.

Según dijo, ni Francia ni España tenían la "culpa" de eso, era la legislación del momento la que "impedía" que el proceso fuera más rápido. Pero con la llegada de la orden europea de detención y los enlaces judiciales la situación ha mejorado y "ya no se pierde" esa labor policial.

INCONVENIENTES Y DIFERENCIAS

Con todo, García-Castellón también reconoció algunos "inconvenientes" a la euro-orden, porque ya no hay un "control central" y, mientras en España todas las órdenes se tramitan en un sólo órgano, en Francia hay 35 órganos judiciales que tratan este tipo de órdenes.

Además, también hay otras diferencias en cuanto a los plazos con los que trabaja cada país, ya que en Francia se dan seis días desde que el arrestado pasa a disposición del fiscal para recibir en el tribunal francés los originales de la orden de detención, y en España no se fijan plazos, y esto les hace a los jueces españoles "ponerse las pilas" para cumplir con los plazos franceses.

En cuanto a la entrega temporal de presos que cumplen condena en cárceles francesas, ahora hay una media de cuatro o cinco entregas mensuales, principalmente para ser juzgados por la Audiencia Nacional.

Para García-Castellón "otro paso importantísimo" han sido los equipos conjuntos de investigación, que han sido "ejemplo para el mundo" y ya hay otros países que han creado equipos de colaboración con Francia y España, no sólo en el ámbito del terrorismo, sino también en otras materias como el narcotráfico.

A ETA, "FRANCIA LE SIRVE PARA CASI TODO"

La fiscal francesa recordó que ETA ha estado instalada en Francia "desde su creación", pero desde 1972 es "ilegal" y, por ello, lo que hasta entonces había sido una presencia "de manera muy visible" entró en la "clandestinidad" y, a la par, ha ido también ampliando su radio de acción en el país vecino, llegando en la actualidad a todo el territorio.

Según dijo, "Francia sirve a ETA para casi todo": como centro para la "formación" de sus miembros, lugar de estancia para los comandos entre acciones, espacio para esconder material militar, robar vehículos y otros materiales para sus acciones, preparar su atentados, etcétera. Y en consecuencia, la banda comete varios delitos en territorio francés.

El pasado año, por ejemplo, se constató que ETA estaba detrás del robo de 77 coches. A esto se añaden delitos por uso de documentación falsa, robos a mano armada y secuestro, o acciones como el asesinato de dos guardias civiles a finales de 2007 en Capbreton, el tiroteo en el que resultó herido un gendarme francés hace un par de semanas, o el robo del vehículo que se utilizó para el atentado de la T4 de Barajas, comentó la fiscal. A día de hoy en las cárceles francesas hay 172 etarras, y unos 700 en las españolas.

La lucha contra ETA ha dado pie también a "muchas innovaciones" en el ámbito de la ayuda penal internacional y se han agilizado trámites que hasta hace diez o quince años eran "bastante pesados".

Entre esos avances, Bussac señaló la creación de los magistrados de enlace --en 1996 el francés y con "cuatro años de retraso" el español, según reconoció García-Castellón--, la puesta en marcha de los equipos conjuntos de investigación o la utilización de la videoconferencia, entre otros.

También aludió a las demandas especiales, que son mayoritariamente españolas y en el 60 por ciento de los casos corresponden a la lucha contra ETA. Ahora, por ejemplo, en Francia tienen "pendiente" una petición a España en la que se solicita documentación sobre la ilegalización de Batasuna para analizar cómo se llegó a esa conclusión, ya que en el país vecino se investiga ahora el entorno ilegal de ETA.