Marzo ha sido el quinto con menos horas de sol desde 1978

Nubes, nublado, atardecer, cielo cubierto
EUROPA PRESS
Actualizado: jueves, 9 abril 2015 17:07

El mes fue frío y húmedo en la región, donde hubo abundante nubosidad y escasa insolación

SANTANDER, 9 Abr. (EUROPA PRESS) -

El pasado mes de marzo fue, en general, frío y húmedo en Cantabria, con abundante nubosidad y escasa insolación. De hecho, el de 2015 ha sido el quinto mes de marzo con menos horas de sol desde 1978, según los registros del observatorio de Parayas.

En su conjunto, las temperaturas han estado por debajo de las habituales y las lluvias, por encima de las esperadas, según la Agencia Estatal de Meteorología, que ha precisado al respecto que los valores registrados en el mercurio oscilaron entre los -5,4 grados de mínima en Cubillo del Ebro (el día 6) y los 24,6 ºC que se alcanzaron en Terán (el día 7).

Por su parte, la mayor precipitación recogida en 24 horas se registró el 26 en Soba, en la zona del Alto Miera, con 55,8 mm, mientras que la racha máxima de viento tuvo lugar el 13 en Santander, donde se alcanzaron los 71 kilómetros por hora.

En cuanto a las temperaturas, la AEMET especifica en un comunicado que marzo resultó frío. Según precisa, en la vertiente cantábrica la insolación fue "escasa" y el viento, del norte dominante. De hecho, algunos días hubo inversión térmica nocturna, lo que propició un ambiente "frío o muy frío".

En las comarcas del interior, donde no se registraron temperaturas especialmente bajas o periodos de heladas significativos, marzo resultó un mes "normal" desde el punto de vista térmico.

Y si se atiende a las precipitaciones, marzo fue un mes húmedo en términos generales, especialmente en los valles orientales y en la montaña occidental, mientras que en zonas del interior las lluvias se han mantenido en parámetros normales.

EVOLUCIÓN DEL TIEMPO A LO LARGO DEL MES

La AEMET ha desgranado que el mes de marzo comenzó en Cantabria con un "apreciable" descenso de temperaturas y lluvias débiles, en forma de nieve por encima de los mil metros.

Desde el día 5 al 12 dominó el ambiente soleado y seco, con un significativo aumento de temperaturas, rebasando los 20 grados en las comarcas del Ebro y Liébana.

Por su parte, los días centrales transcurrieron en un ambiente fresco, con temperaturas por debajo de los valores habituales en esa época del año, y heladas nocturnas en los valles cantábricos y del interior. Los días 16 y 17 fueron los únicos en los que no llovió, mientras que las precipitaciones fueron abundantes entre el 23 y 26, cuando la nieve volvió a caer por debajo de los mil metros.

En los últimos días del mes volvió la estabilidad, de modo que cesaron las lluvias y subieron las temperaturas.

Leer más acerca de: