SANTANDER, 18 Feb. (EUROPA PRESS) -
El juzgado de lo Penal número 4 de Santander ha impuesto una multa de 2.160 euros a un conductor que, bajo los efectos del alcohol, se subió a una glorieta y se quedó dormido dentro del coche.
Los hechos sucedieron en diciembre de 2010 en Santander, en la rotonda que está en el cruce entre la Avenida de Los Castros y la Bajada de San Juan.
Fue allí donde el conductor de un turismo circulaba bajo los efectos del alcohol y, tras subir a la glorieta, se quedó dormido, situación en la que se le encontró la Policía Local cuando llegó.
El acusado dio un resultado positivo en las pruebas de alcoholemia y luego se comprobó que además no tenía carnet de conducir.
En consecuencia, se le condena, por delitos contra la seguridad vial, a una multa, así como a 31 días de trabajos en beneficio de la comunidad.