SANTANDER, 9 Jul. (EUROPA PRESS) -
El número de asuntos registrados por el Juzgado de Menores de Cantabria ha aumentado un 52,21 por ciento entre el año 2002 y el 2006 y, en paralelo, se ha elevado también la tasa de congestión y de pendencia de este órgano, que ahora, como media, tarda más de un año en resolver los asuntos, cuando en 2002 lo hacía en poco más de dos meses y medio.
Estas son algunas de las conclusiones que se extraen de un estudio realizado por el Servicio de Inspección del Consejo General del Poder Judicial, al que tuvo acceso Europa Press y, según el cual, el Juzgado de Menores ha pasado de los 203 casos registrados en el año 2002, a 309 asuntos ingresados el pasado 2006.
En la línea del aumento de la carga de trabajo en ese periodo, el Juzgado incrementó también su capacidad de resolución, ya que, frente a los 195 asuntos resueltos en 2002, el pasado año se alcanzaron los 301, un 54,35 por ciento más.
Sin embargo, esa mayor resolutividad no ha sido suficiente para dar salida a los asuntos pendientes, que se han triplicado, pasando de los 71 asuntos pendientes al terminar el año 2002, a 237 al cierre de 2006, con lo cual la tasa de pendencia se sitúa en el 1,22, casi un punto más que en el 2002, cuando era del 0,24.
Esto se ha plasmado también en el tiempo medio de resolución de cada proceso, la tasa de resolución y la de congestión. Así, en 2006 el Juzgado de Menores tardó una media de 13,37 meses en resolver cada asunto, mientras en 2002 necesitaba para ello 2,59 meses.
La tasa de resolución, por su parte, ha caído del 1,48 del año 2002 (por encima de uno indica que se resolvieron más asuntos de los recibidos en el año y por debajo, lo contrario) a un 0,63 en el ejercicio 2006. Finalmente, la tasa de congestión ha crecido del 1,24 del primero de los años analizado, a 2,22 en 2006.
Al margen las cuestiones de actividad, el informe del CGPJ también analizó la situación de las infraestructuras y los recursos materiales y humanos. Según el estudio, el Juzgado de Menores cuenta con seis personas en su plantilla: un magistrado, un secretario, dos funcionarios del cuerpo de tramitación procesal, otro del de gestión procesal y uno más del cuerpo de auxilio judicial.
En cuanto a los medios e infraestructuras, muchos de los cuales comparte con otros juzgados, el CGPJ reconoce la necesidad de dotar a las instalaciones de un local adecuado para los menores detenidos, de un sistema de grabación audiovisual para la sala de vistas y de una mejora del programa informático.