SANTANDER, 8 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Asociación Pombo-Cañadío ha solicitado en los juzgados la adopción de medidas cautelares para impedir las instalación de las casetas que participarán este año en la Feria de Día durante la Semana Grande de Santander.
En un comunicado, el concejal de Cultura y Ocio, César Torrellas, lamentó la actitud de la asociación, a la que acusó de querer dejar a los santanderinos y los visitantes "sin uno de los actos más aclamados y valorados" de las fiestas patronales.
Según dijo, la intención de la asociación es también "acabar con todos los actos paralelos" a la Feria de Día de carácter cultural, como las intervenciones artísticas que se realizarán en zonas de casetas y las actividades de teatro de calle.
Frente a ello, además de resaltar el éxito y el poder de reclamo de esta celebración, el concejal recordó que el pasado año se desarrolló con "absoluta normalidad y sin ocasionar molestias al vecindario", puesto que las casetas cierran a las doce de la noche los días laborables y a la una de la madrugada los festivos y vísperas de fiesta.
Este año, no sólo se mantiene el horario, sino que además la música estará limitada todos los días a una determinada potencia y a un determinado horario, de tal manera que se suspenderá durante las horas de siesta y a partir de las doce de la noche.
Para Torrellas, "es lamentable que personas como las que dirigen la asociación Pombo-Cañadío persigan acabar" con esta Feria, de 12 días de duración. "Es incomprensible la sinrazón de estos señores a la hora de entender que este tipo de acontecimientos son los comunes en todas las ciudades del país durante su semana festiva", agregó.
Además, recalcó que mientras el resto de asociaciones "comprenden y aceptan de buen grado" e incluso "solicitan la programación de este tipo de iniciativas en sus calles y plazas", "a los dirigentes de Pombo-Cañadío no les importa lo mas mínimo el sentir general de la ciudadanía de Santander, ni siquiera de sus propios vecinos, muchos de los cuales se oponen tajantemente a la desaparición de la Feria de Día del programa festivo".
"Qué vamos a esperar de unos señores a los que incluso les molesta el ruido de unos carruseles infantiles y han pretendido dejar sin negocio y forma de vida a sus propietarios", apostilló.
INTERÉS GENERAL POR ENCIMA DE CAPRICHOS
Torrellas resaltó que desde el Ayuntamiento siempre se ha trabajado por "conciliar" el derecho al descanso con el derecho al ocio de los santanderinos y "de manera permanente" se ha estado dispuesto a colaborar con esta asociación de vecinos "en todas y cada una de sus demandas", desde el botellón de la plaza Cañadío, que se ha "conseguido eliminar", "hasta el árbol de la plaza Pombo que les quitaba la luz".
"Lo que no podemos hacer es eliminar del programa de fiestas de Santander un evento que sabemos con certeza están esperando con ilusión miles y miles de santanderinos y que además no perjudica a nadie, sino que por el contrario es beneficioso para el conjunto de la ciudadanía y para sectores productivos claves en nuestra economía local como son el turismo y la hostelería, en especial en estos tiempos de crisis económica, y que además generará numerosos puestos de trabajo", sentenció.
"En el Ayuntamiento estamos para trabajar por el interés general de los santanderinos y no para atender los caprichos personales de los dirigentes de una asociación de vecinos, a quienes afortunadamente ya todos vamos conociendo", concluyó Torrellas.