SANTANDER 17 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Programa de Educación Ambiental en el Centro Penitenciario de El Dueso (Santoña), organizado por el Centro de Investigación del Medio Ambiente (CIMA) de la Consejería de Medio Ambiente, realizó durante el año 2009 un total de 11 sesiones.
Según la memoria del CIMA, consultada por Europa Press, durante 2009 se inició la actividad correspondiente al programa de educación ambiental sobre cambio climático en El Dueso.
Este programa educativo, innovador en cuanto a sus destinatarios y al entorno en que se ha desarrollado, se ha diseñado para intentar satisfacer las necesidades del centro en el contexto del Programa NACAR. En concreto, se ha trabajado con los internos abordando distintas cuestiones ambientales con el hilo conductor del cambio climático.
Tras una visita al centro penitenciario, se optó finalmente por un programa de largo recorrido en el que poder abordar distintas cuestiones ambientales en torno al cambio climático como el uso racional del agua, la energía, el consumo o los residuos, entre otros.
Así, este programa ha sido desarrollado a lo largo de todo el año 2009 con un total de 11 sesiones.
El reto planteado ha sido la motivación de los internos y la puesta en valor de su capacidad de incidir en cuestiones ambientales promoviendo hábitos respetuosos.
El CIMA destaca de esta iniciativa su carácter versátil, inducido en gran parte por la propia diversidad de los destinatarios entre los que se contaban desde personas sin alfabetizar hasta otras con un nivel de formación medio. Durante todo el año se han ido rediseñando y adaptando las actividades previstas para optimizar los resultados y la asimilación de los conceptos básicos relacionados con el cambio climático.
Para ello, se han adaptado a las circunstancias distintas técnicas de dinamización como un taller de futuro, la elaboración de un análisis DAFO, el videofórum o las salidas de campo.
La valoración del proyecto ha sido muy positiva por todas las partes (CIMA, Dueso e internos), habiendo mantenido una media de unos 15-20 asistentes en todas las actividades con excelentes resultados en lo que se refiere a asimilación de conceptos ambientales y a la adopción de hábitos más respetuosos.
Como resultado final del proyecto se han editado, de manera conjunta entre los internos y el CIMA, tres carteles desplegables que recogen las principales reflexiones sobre causas, efectos y buenas prácticas en relación al cambio climático, siempre adaptando los contenidos y consejos a la realidad de este centro penitenciario.
Entre sus contenidos, se recogen indicaciones sobre posibles medidas que podrían contribuir a hacer más sostenible este centro, tanto por parte de la dirección, con intervenciones concretas, como por parte de los internos, adoptando actitudes proambientales.