SANTANDER 15 Dic. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Cantabria, el regionalista Miguel Ángel Revilla, dijo hoy, respecto a la retirada de crucifijos de las aulas, que hay que respetar "sobre todo" lo que digan los padres y también los propios centros educativos, si bien dejó claro que a él no le "molesta para nada".
En una entrevista en Punto Radio, recogida por Europa Press, el presidente del Gobierno cántabro señaló que sobre este asunto "no tengo nada que decir".
"Que voy a decir; creo en Dios, no es que sea muy practicante, soy católico y por tanto no tengo nada que decir en esta materia", señaló Revilla, quien consideró que en este tema "hay que respetar sobre todo lo que digan los padres y lo que diga cada colegio".
Tras indicar que en este asunto "sí que se puede tener en cuenta la opinión mayoritaria de la gente", Revilla confesó que a él no le molesta "para nada".
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