SANTANDER, 6 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Sindicato Médico de Cantabria (CESM) advirtió hoy de la posibilidad de retomar "medidas de presión" e incluso llegar a la huelga en el Servicio Cántabro de Salud (SCS) de continuar la actual situación de "absoluto maltrato" a los profesionales médicos --en especial a los sustitutos y a las plantillas de la Gerencia de Atención Primaria Santander-Laredo--, y si sigue sin cumplirse el acuerdo que puso fin a la huelga del pasado año, un acuerdo que, a su juicio, "se ha quedado en humo" porque "no se ha llevado adelante".
Así lo dijo hoy el vicesecretario y portavoz del sindicato, Vicente Alonso, quien compareció en rueda de prensa acompañado del presidente de la organización sindical, Javier Santiuste.
Aunque confió en no tener que llegar a las medidas de presión, Alonso subrayó que los profesionales están "quemados y en cualquier momento" podrían recurrir de nuevo a medidas de presión. Por lo pronto, el Sindicato Médico celebrará esta tarde una reunión con los médicos sustitutos y el día 11 con los médicos propietarios de Atención Primaria para analizar la situación y ver si se puede "salir dialogadamente del trauma" o hay que "iniciar medidas de protesta muy duras".
En tal caso, se comenzaría por la presentación de firmas, después manifestaciones y en el peor de los casos una nueva huelga médica. Pero antes de llegar a ese punto quieren "acelerar" las mesas de negociación con los responsables sanitarios para exigir el cumplimiento del acuerdo y la definición de una "política rigurosa" de recursos humanos. "A ver si alguien tiene cabeza y toma medidas", apostilló Alonso, quien recalcó que, de lo contrario, "el problema va a ser serio".
Lo que lleva al Sindicato Médico a dar la voz de alarma es el "déficit" de médicos y el "maltrato" al que, aun así, dicen verse sometidos. Según aseguró Vicente Alonso, llevan "tiempo avisando a la administración" de la necesidad de una buena política de recursos humanos, pero no se ha llevado a cabo.
Prueba de ello es, a su juicio, el hecho de que los médicos sustitutos hayan decidido constituir una asociación ante la situación "caótica" en que se encuentran, una situación que, en ocasiones, según Alonso, ha llegado a los "insultos" y a la "amenaza" de ser expulsados de la lista de sustituciones si no aceptaban contratos con jornadas "que se salen de lo normal" y "vulneran" los derechos de los trabajadores.
El vicesecretario del Sindicato Médico señaló directamente como responsable de algunas de esas prácticas a la directora de gestión de la Gerencia de Atención Primaria Santander-Laredo, Begoña Vallejo, que, según sostiene Alonso, amenazó a once profesionales con expulsarles de la lista si no firmaban contratos en esas condiciones. El sindicato ha recurrido por ello ante el gerente de Atención Primaria y asegura que "llegará más lejos".
SE PUEDE PRODUCIR UN "CAOS".
La CESM no comprende que se apliquen estos métodos y se propongan contratos "absolutamente irregulares", máxime cuando la región se encuentra con un problema de "déficit" de sustitutos --agravado este año porque no habrá promoción de médicos de familia-- y tiene sólo 102 médicos en la lista de sustituciones para hacer frente a la Semana Santa y el verano.
A juicio de Alonso, se necesitarían al menos "ciento y pico" médicos más y no ve factible que se puedan "importar" de otras regiones mientras no se mejoren las condiciones que se ofrecen.
Si no se toman medidas, auguró que Atención Primaria se verá abocada a un "auténtico caos" que, unido a las listas de espera --que en muchos casos "se inician desde Atención Primaria"-- puede llevar a los usuarios del sistema a una "situación crítica".
Desde el Sindicato Médico, demandan una política de recursos humanos "rigurosa" porque, en su opinión, el Plan de Recursos Humanos vigente es un "cachondeo", que "no recoge" ninguno de los aspectos que deben contemplarse en un documento de estas características y que el anterior responsable de recursos humanos del SCS "obligó a firmar a varios sindicatos en pleno conflicto".
"LOS JEFES INDIOS Y LOS JEFECILLOS".
El vicesecretario de la CESM mostró además la tristeza del sindicato porque tras los cambios al frente de la Consejería de Sanidad y la firma del acuerdo que puso fin a la pasada huelga médica pensaban que "iba a empezar una nueva etapa" de diálogo "constante". Sin embargo, lamentó que tras salir de una huelga "dura" con un acuerdo "interesante", ese documento "se ha quedado en humo y no se ha llevado adelante".
Según dijo, no se están cumpliendo los acuerdos sobre las sustituciones en Primaria, sobre las guardias médicas o los relativos a las comidas a los facultativos que estén de guardia.
El problema, en palabras de Alonso, es que los "jefes indios" --expresión con la que se refirió a los máximos responsables de la administración sanitaria--, les tratan "muy bien"; pero los "jefecillos" --los mandos intermedios-- "no llevan adelante" los acuerdos cerrados con los jefes en favor de las "tribus" --el personal en el lenguaje de Alonso--.
"Si el jefe sigue dando buenas palabras y los jefecillos no las recepcionan, de poco nos va a servir", sentenció el vicesecretario de la CESM, quien achacó esta situación a "reminiscencias que quedan de la Consejería anterior".