Achaca el incidente a las pruebas que se realizan para la puesta en marcha de la estación depuradora
SANTANDER, 16 Oct. (EUROPA PRESS) -
La dirección de la empresa Sniace ha rechazado "rotundamente" las denuncias realizadas hoy por vecinos del barrio de Duález sobre unos "vertidos salvajes" al río Besaya de aguas industriales contaminadas, y ha advertido que, "dado el carácter amenazante y difamatorio de las denuncias que se han presentado o en lo sucesivo se puedan presentar, la empresa, a través de los servicios jurídicos, ejercitará las acciones legales que correspondan".
En un comunicado, la dirección de Sniace explicó esta tarde que en cuanto los técnicos de la empresa detectaron esta mañana manchas de espuma en la superficie de río, inmediatamente se han puesto en marcha los protocolos de actuación de Sniace con vistas a identificar el posible origen.
La empresa explicó que los responsables de la fábrica han verificado que no se ha producido ningún vertido fortuito, avería u operación indebida que pudiera ocasionar la presencia de espumas.
Según Sniace, los medidores en continuo encargados de la medición de la materia orgánica instalados en el punto de control de vertidos de la empresa "no detectaron ninguna desviación en los parámetros que la compañía debe de cumplir según la AAI (Autorización Ambiental Integrada)".
Estas mediciones "descartan totalmente el vertido de lejías bisulfíticas al río y cualquier otro de naturaleza contaminante", señaló Sniace que explicó que dentro del análisis de otros supuestos y como situación fuera de los procesos fabriles, desde el día 14 de octubre se vienen poniendo en servicio las instalaciones de cabecera de la EDAR de la empresa.
Tras explicar que estas instalaciones están formadas por los colectores de envío del vertido industrial desde las fábricas, la arqueta de llegada y el pozo de bombeo de la depuradora, la empresa señaló que para la realización de estas pruebas se ha bombeado agua, de forma intermitente, desde los puntos normalmente controlados a estas nuevas instalaciones.
Indicó que aunque estas pruebas, por si solas, "no deberían haber ocasionado ningún conflicto", al provocar variaciones bruscas en los niveles de los canales "no se ha podido garantizar una homogeneidad en la neutralización de los vertidos".
Sniace aseguró que en las futuras pruebas que se realizarán para comprobar el correcto funcionamiento de las instalaciones de la EDAR, previas a la puesta en marcha definitiva, no se prevé la necesidad de la realización de este tipo de maniobras, sino la alimentación continuada y homogénea de aguas a la estación depuradora.
