Los nueve agentes fallecidos desde la creación de la Agrupación de Tráfico reciben homenaje en el aniversario
SANTANDER, 3 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Subsector de Tráfico de la Guardia Civil y la Jefatura Provincial de Tráfico celebraron hoy sus 50 años en Cantabria con la convicción de que las carreteras son hoy "más seguras", pero también de la necesidad de mantener las medidas y esfuerzos para que no se produzcan más tragedias.
El muelle de Santander, junto a la grúa de piedra, fue escenario esta mañana del acto conmemorativo de este 50 aniversario, en el que se distinguió a miembros de la Guardia Civil y la Jefatura de Tráfico y se rindió homenaje a los nueve agentes y mandos de la benemérita que han fallecido en acto de servicio en la región desde la creación del Subsector de Tráfico.
En el acto, el delegado del Gobierno en Cantabria, Agustín Ibáñez, consideró que estos 50 años de trabajo y de "abnegada labor" por reducir cada año la "tragedia humana" en las carreteras deben mover a la reflexión sobre el "pasado, el presente y el futuro".
Y esa reflexión permite constatar que nuestras carreteras son hoy "más seguras", pero también la necesidad de seguir trabajando en ello. Según dijo, los agentes de Tráfico, que han visto "de cerca la tragedia", son los que mejor saben que "no sobra ninguna medida ni esfuerzo para evitar una tragedia más".
Ellos mismos han pagado un "tributo muy alto" en el desempeño de su labor, que se ha cobrado la vida de nueve compañeros desde la creación del subsector en Cantabria y que hoy mantiene grave a otra compañera atropellada hace diez días cuando atendía un accidente. Ibáñez trasladó a su familia "ánimo y solidaridad", y confió en una "pronta recuperación" de la herida.
"La vida en la carretera no es fácil, porque es un medio agresivo y hostil", comentó el delegado del Gobierno, que mostró su reconocimiento a las familias de los fallecidos en acto de servicio.
TRABAJO "CONSTANTE" Y "SIN DESCANSO"
Al igual que el delegado, el jefe del Subsector de Tráfico en Cantabria, el capitán Lorenzo Bárez, recordó a los compañeros fallecidos en las carreteras de la región mientras desempeñaban la labor "constante, intensa y discreta" propia de esta agrupación. Todos ellos "siguen con nosotros", afirmó.
También se refirió a los dos últimos agentes atropellados hace diez días cuando atendían un accidente. Uno de ellos está ya fuera del hospital, mientras la otra agente ha experimentado una "notable mejoría, dentro de la gravedad".
Por su parte, el jefe provincial de Tráfico, Serafín Sánchez, destacó la labor realizada desde la Dirección General de Tráfico para "velar por la seguridad vial", con una "persecución reiterada" de las conductas peligrosas, contra las que se ha luchado "sin descanso y siempre con tenacidad, utilizando todos los recursos y desde todos los frentes".
Pero también en esto han cambiado las cosas porque, apuntó, parece que se empieza a invertir la tendencia y las buenas conductas al volante "prevalecen e incluso se contagian", un logro que, a su juicio, se debe en parte a los cambios normativos y las medidas de Tráfico, pero que no habría "calado de no encontrar una sociedad cansada de tanta tragedia".
DISTINCIONES
Esos resultados son también fruto del trabajo realizado en estos 50 años por los agentes de la Guardia Civil de Tráfico y por los funcionarios de la Jefatura Provincial de Tráfico, algunos de los cuales fueron por ello homenajeados en el acto.
Así, se entregaron sendos diplomas a Manuel Azpiazu, trabajador de la Jefatura, así como al subteniente Teodoro Caballero, de la agrupación de la Guardia Civil; y a dos agentes miembros de la primera promoción de la Agrupación de Tráfico en Cantabria, los capitanes José Antonio Quintana y Antonio Villanueva.
También se rindió homenaje a todos los jefes del Subsector, en la persona de Elena Gómez de Merodio, viuda del que fue el primer jefe de la agrupación, José Pérez Álvarez. Asimismo, se concedió la Medalla al Mérito de la Seguridad Vial a un agente herido de gravedad hace dos años en acto de servicio.
Además, se homenajeó a los fallecidos en los 50 años de la Agrupación de Tráfico: el capitán Juan Gutiérrez Vidal, el teniente Miguel Alonso Cuevas, el sargento Agustín Hernández Jiménez, el cabo primero Agustín Álvarez Villacorta y los guardias civiles Pedro Retorta Manrique, Iván López Sedano, Fidel Baró Franco, Emilio Redondo y José Antonio Otero. Las familias de cinco de ellos estaban presentes para recoger las correspondientes distinciones.
El homenaje terminó con una ofrenda floral a cargo de una niña vestida de Guardia Civil y un 'toque de oración'. Y tras estos actos, se inauguró la exposición sobre el aniversario que puede verse en el Palacete del Embarcadero.
Al acto se sumaron, además de miembros de la Guardia Civil y la Jefatura Provincial de Tráfico, familiares y autoridades, así como representantes de otros cuerpos de seguridad y policías locales, del Ejército y de la Ertzaintza.
Entre otros, estaban el primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Santander, Santiago Recio; el concejal de Protección Ciudadana, Eduardo Arasti; el presidente de la Audiencia Provincial, José Luis López del Moral; la fiscal superior de Cantabria, María Teresa Calvo; la jefa superior de Policía, Pilar Allué; el delegado de Defensa en Cantabria, José María Grande Urquijo, y el obispo de Santander, Vicente Jiménez Zamora.
