SANTANDER, 5 Abr. (EUROPA PRESS) -
La utilización de internet y de páginas web propias en la gestión del negocio es en general baja en el comercio de Cantabria, siendo mayor en los sectores del textil y calzado, y de productos farmacéuticos y médicos, y menor en el de alimentación y bebidas.
También existen diferencias por localidades, de forma que en Torrelavega existe una mayor incidencia de comercios innovadores, es decir que usan o están abiertos a las nuevas tecnologías, que en Santander.
Estas son algunas de las conclusiones de un estudio sobre la situación de las tecnologías de la información y comunicación (TIC) en los comercios minoristas de Cantabria realizado por la Universidad de Cantabria por encargo de la Fundación Comercio Cantabria, y que se ha basado en entrevistas a presidentes de diez asociaciones de comerciantes y encuestas en 440 negocios.
El estudio ha sido presentado este martes en rueda de prensa por su autor, el profesor de la UC Héctor San Martín; el director de la Fundación Comercio Cantabria, Jesús Collado, y el consejero de Economía y Hacienda del Gobierno regional, Ángel Agudo, quien ha lanzado "un mensaje claro" a los comerciantes para que hagan una "apuesta personal" por la formación y las nuevas tecnologías.
Agudo ha recalcado que el Ejecutivo va a "facilitarles los medios", pero la apuesta debe ser de los propios comerciantes, ya que de lo contrario la productividad y competitividad asociada a las nuevas tecnologías será "un freno" para sus negocios.
El estudio, según ha explicado San Martín, pone de manifiesto que existe una "brecha significativa" entre el conocimiento de las TIC, que es alto, y su baja utilización en el comercio minorista, una "brecha" que es más importante para las tecnologías y aplicaciones más sofisticadas.
A medida que aumenta el grado de sofisticación de las tecnologías, se reduce la importancia que el comercio otorga a las mismas de cara a su utilidad para el negocio. El principal problema percibido por los comerciantes en la implantación de las TIC es su elevado coste económico.
El estudio agrupa en tres grupos los comercios: los 'Innovadores en TIC', con una actitud positiva hacia las tecnologías y que no perciben problemas para su uso; los 'Refractarios a las TIC', con una actitud negativa y que perciben problemas para la implantación de las mismas; y los 'Abiertos a las TIC', con actitud positiva, pero que perciben barreras en el uso de las tecnologías.
Los primeros son los que más uso hacen de internet y de la web propia, al contrario que los segundos, que son los menos dispuestos; mientras que los terceros se situarían en un lugar intermedio. Estos últimos son los que demandan más formación para superar las barreras en la implantación de las tecnologías, ha destacado San Martín.
El autor del estudio ha considerado que las diferencias entre sectores más "innovaores", como los de textil, calzado y productos médicos, el menos (alimentación y bebida), puede corresponderse con el propio nivel tecnológico de cada uno de ellos, alto en el primer caso y no tanto en el segundo.
Por su parte el consejero ha señalado que el hecho de que el comercio de Torrelavega sea "mucho más innovadores" que el de Santander, va a dar lugar a que las políticas de formación tecnológica se "concentren" más en la capital cántabra.
FORMACIÓN MÁS QUE SUBVENCIÓN
En esta línea, Agudo ha destacado que el actual Gobierno regional ha ido reduciendo las meras subvenciones desde su llegada para incrementar las ayudas para equipamiento tecnológico, creación de web y formación, y su intención es centrarse en la formación específica vinculada a las nuevas tecnologías.
El consejero ha destacado el interés del Ejecutivo por que la gestión del comercio cántabro sea "muy profesional", y ha subrayado el valor para el comercio y la economía en su conjunto de este estudio, que analiza dos variables "estratégicas" como son la formación y la tecnología con el fin de superar un "déficit" importante en el sector servicios en general y en el del comercio en particular.
Al respecto ha señalado la importancia de las nuevas tecnologías para afrontar los problemas de productividad y competitividad en el comercio cántabro, algo que se tiene que "combatir" a su juicio actuando sobre la formación y las TIC, dado que supone un "grave lastre" para generar riqueza y empleo en la región.
Según el consejero, en este estudio se pone de manifiesto que son precisamente los comercios abiertos a las nuevas tecnologías los que "perciben" que su negocio va mejor.
TRABAJO DE LA FUNDACIÓN
Por su parte el representante de la Fundación Comercio Cantabria ha destacado la "relevancia" que los resultados el estudio tienen para el sector, y ha señalado que esta organización va a trabajar especialmente con el colectivo que menos utiliza las TIC y más problemas percibe en ellas.
Para los más innovadores, la Fundación trabajará con los comerciantes para introducir los "productos" que se adecuen mejor a sus necesidades, ha añadido. Así, ha señalado que la Fundación trabaja con la Universidad de Cantabria en un programa de formación dirigido a los comerciantes con mayor nivel tecnológico y que verá la luz en el último semestre de este año.
Collado ha anunciado que las conclusiones del estudio 'Diagnóstico Tecnológico del comercio minorista en Cantabria: equipamiento, necesidades y actitudes hacia la innovación tecnológica', se presentarán a los comerciantes en dos actos que tendrán lugar este martes, día 5, a las ocho de la tarde, en la Cámara de Comercio de Cantabria, y el 14 de abril, a las ocho y media de la tarde, en la cámara de comercio de Torrelavega.