Abertis insta a buscar soluciones para autopistas en riesgo de quiebra por el prestigio del sistema

Autopista Ap-36 Madrid-Levante (Ocaña-La Roda)
FERROVIAL
Actualizado: martes, 27 marzo 2012 14:13

BARCELONA/TOLEDO, 27 Mar. (EUROPA PRESS) -

El presidente de Abertis, Salvador Alemany, ha instado al Ministerio de Fomento a buscar soluciones para las autopistas en riesgo de quiebra, ya que ha remarcado que le corresponde al Gobierno determinar las acciones a llevar a cabo, pero también ha pedido implicación al resto de partes interesadas, sobre todo bancos y empresas concesionarias, apelando al prestigio del sistema.

"Todo el mundo deberá arrimar el hombro para tratar que estas autopistas con dificultades, en parte por la coyuntura y en parte por su diseño, superen sus problemas, porque el prestigio del sistema concesionario español requiere que seamos capaces de encontrar soluciones", ha manifestado en la rueda de prensa previa a la junta de accionistas de este martes en Barcelona.

En este sentido, ha recalcado que Abertis no pondrá en cuestión sus balances en buscar una solución "si no se plantea con una transparencia absoluta y con soluciones buenas tanto para el interés general como para la compañía".

"En esta o en cualquier otra operación donde creamos que existe este doble efecto, que nuestro valor como compañía aumenta y que contribuyamos a resolver un problema general, siempre nos van a encontrar en el lado de la solución", ha añadido.

Sin embargo ha remarcado que la compañía "no se implicará" en una solución que plantee salvar las autopistas deficitarias con la prolongación de las concesiones en otros territorios.

En la actualidad, nueve autopistas están en riesgo de declararse en concurso de acreedores, como consecuencia del sobrecoste que sufrieron en las expropiaciones y la caída de los tráficos por la crisis, entre las que figuran las radiales de Madrid, la que une la capital con el aeropuerto de Barajas, la Madrid-Toledo y la Cartagena-Vera.

Las concesionarias de estas vías, que suman un pasivo de unos 3.000 millones de euros, están participadas por los principales grupos constructores y de concesiones del país.