La acusada de matar a un hombre en Toledo tras robarle asegura que "no sabía lo que hacía"

Europa Press Castilla-La Mancha
Actualizado: miércoles, 1 julio 2009 16:52

TOLEDO, 1 Jul. (EUROPA PRESS) -

La mujer, identificada como Y.F.A., acusada de un delito de robo con violencia en concurso con un delito de homicidio, cometidos contra un hombre al que mató con un cuchillo jamonero en Toledo, tras robarle dinero, aseguró hoy durante el juicio que se sigue por esta causa que "no sabía lo que hacía".

Durante la vista por estos hechos, acaecidos el 12 de diciembre de 2007, la acusada reconoció que lo hizo en defensa propia porque la víctima no le dejaba salir de la casa, y aseguró que en el momento de los hechos se encontraba en un profundo estado de agitación.

La defensa reclama un año de prisión por un homicidio por imprudencia, y seis meses de cárcel por un delito de hurto, "si no se apreciara la circunstancia eximente de trastorno mental transitorio", muy por debajo de la solicitud del Ministerio Fiscal, que pide 15 años de prisión.

En declaraciones a los medios, el abogado de la defensa, José López Díaz, aseguró que "esta mujer ha hecho una barbaridad, pero no era consciente de lo que hacía". Reconoció que "lo cierto es que ha matado", pero insistió en que "con su manera de comportarse, no creo que lo hiciera a propósito".

López Díaz declaró que "si tengo que creerla, ella me dice que no sabe lo que pasó", y es que "en algún momento de tu vida puede pasarte algo así, que se te crucen los cables y no sepas lo que haces", lamentó.

Durante el juicio, en sus conclusiones, el abogado aseguró que "nunca estuvo en el ánimo de la acusada causar una lesión", y que los hechos que se produjeron "fueron consecuencia de su estado emocional", ya que "no sabía qué hacía", declaró.

La prueba de que "perdió la cabeza" es que una vez cometidos los hechos "se fue corriendo de la casa del fallecido dejando un reguero de sangre hasta su casa, y manchando su cama en un estado evidente de agitación", explicó el abogado, quien pidió que se considere el atenuante de la pena debido a la irresponsabilidad de los actos de su defendida.

Respecto al hurto, insistió en que se produce en un momento cronológico distinto y que fue "sin ninguna fuerza", es decir, que no hubo violencia en sus actos, porque la víctima ya estaba muerta.

HECHOS

Según la calificación del Fiscal, que no ha variado sus conclusiones, la acusada, con ánimo de obtener un ilícito beneficio, y tras coger de su domicilio un cuchillo jamonero, se subió al domicilio de la víctima, situado en el mismo edificio que el suyo y propietario de la vivienda que ella habitaba.

Una vez allí, la víctima le abrió la puerta a la acusada quien, conocedora de que aquel solía tener dinero en su casa, esgrimiendo el cuchillo que portaba y aprovechándose de la avanzada edad del hombre, le colocó aquel en el cuchillo, exigiéndole la entrega del dinero que tuviera en el domicilio.

Como él no accedió, se encadenó una violenta pelea en la que él intentó quitarle el cuchillo asestándole la procesada varias cuchilladas, aprovechando ella para registrar los bolsillos de la ropa del hombre, haciendo suyos 555 euros en 11 billetes de 50 euros y uno de cinco. A continuación ella se marchó, dejando al hombre en el suelo y malherido, falleciendo a consecuencia de las citadas heridas causadas por la acusada.

El Fiscal, que pide que se indemnice a los herederos de la víctima en 40.000 euros, tiene en cuenta para imponer su pena la circunstancia modificativa de la responsabilidad criminal de abuso de superioridad.

Sobre este último asunto, la defensa de la acusada considera que no existió tal abuso de superioridad porque aunque la víctima era mayor y ya tenía sus facultades mermadas, "la acusada no tiene una gran constitución para tener en cuenta abuso de superioridad".

También recordó, basándose en la declaración del compañero de piso de la acusada, que aún no se ha establecido si el cuchillo pertenece a la misma.

Contenido patrocinado