CIUDAD REAL, 7 Ago. (EUROPA PRESS)
La alcaldesa de Fontanarejo (Ciudad Real), Aurora Fernández, decidió, a partir de hoy, y de manera indefinida, "cerrar" el Ayuntamiento al público para reclamar una solución a la falta de un secretario-interventor que, en su opinión, está "estrangulando" la gestión municipal.
En declaraciones a Europa Press, Fernández recordó que Fontanarejo --de unos 300 habitantes-- no puede mantener, dadas sus escasas finanzas, un secretario-interventor y que, hasta finales del año pasado venía compartiendo uno con otros dos municipios, Arroba de los Montes y Alcolea de Calatrava.
Por sus discrepancias con la forma de gestionar de esta persona, Fernández, según explicó, convino con los otros dos alcaldes, la posibilidad de romper la agrupación para compartir secretario, con lo que ambos estuvieron de acuerdo, algo que también fue ratificado por la Consejería de Administraciones Públicas, con un informe negativo de la Diputación y otro positivo de la Subdelegación del Gobierno.
Desde entonces, el Ayuntamiento ha venido solicitando a la Diputación provincial, a través de su servicio de Asesoramiento a Corporaciones Locales, que se le facilite un funcionario para realizar estos servicios, algo que sólo se le facilitó temporalmente durante algo más de un mes, con un secretario y un interventor que finalizaron su trabajo el 30 de junio.
Por otro lado, durante la revisión de la gestión del anterior secretario, se descubrió, según Fernández, que este hombre hizo funcionario interino a un alguacil que, en estos momentos, esta dado de baja.
Para Fernández, esta situación de falta de secretario ha impedido que se celebrarán plenos desde hace varios meses e imposibilita que se pueda convocar uno para sacar a concurso público la plaza que ahora ocupa este funcionario interino y poder contratar a un funcionario de manera estable, que haga las funciones de secretario, dado que la contratación de uno con este título, con unos ingresos que superan los 38.000 euros año, es imposible para las arcas municipales.
La alcaldesa de Fontanarejo critica la actuación de la Diputación en este caso y también el agravio comparativo que sienten frente a ayuntamientos de más habitantes que, en casos parecidos, han recibido ayuda y apoyo para solucionar problemas circunstanciales como éste.
Una situación que, en todo caso, según la alcaldesa, está colapsando la gestión municipal, dado que, además de no poder realizar plenos, con muchos asuntos acumulados, no se pueden realizar certificaciones, lo que puede conllevar la pérdida de subvenciones.
Fernández confirmó, por otro lado, que la única persona que trabaja en el Ayuntamiento, una auxiliar administrativa, seguirá realizando trabajo interno en el mismo, pero que sus instalaciones permanecerán cerradas a los vecinos hasta que se solucione la situación.
