Ayuntamiento de Toledo dice que mantiene la puerta abierta al diálogo con los sindicatos para aplicar la sentencia de TS

TOLEDO 17 May. (EUROPA PRESS) -

El equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Toledo dijo hoy que mantiene su "firme intención de mantener abierto el diálogo con los sindicatos y de cumplir con los acuerdos que se alcancen siempre y cuando se enmarquen en el respeto escrupuloso de la legalidad vigente", informaron en nota de prensa.

"Prueba de la voluntad del Gobierno local de cumplir con los compromisos consensuados con los representantes de los sindicatos es la homologación del personal laboral o el Plan de Modernización de la Policía Local, que implica la subida de dos niveles en el complemento de destino de los agentes", agregan estas fuentes.

En este sentido, señaló que los responsables municipales y sindicales se reunieron el pasado día 8 de abril para negociar la aplicación de la sentencia del Tribunal Supremo que anula los acuerdos alcanzados en 2002 en el seno del Ayuntamiento, en aquel momento gobernado por el Partido Popular.

En aquel encuentro, según indican, se solicitó a las organizaciones sindicales la presentación de propuestas concretas para aplicar la decisión judicial, y apuntan que "la semana pasada, al día siguiente del anuncio de movilizaciones, los sindicatos, en mesa de negociación, se comprometieron a presentar una propuesta conjunta para avanzar en la solución del conflicto, aunque todavía no se ha recibido por parte del equipo de Gobierno".

El Gobierno local quiso aclarar que "se ha pedido la participación de los sindicatos a pesar de que la mayoría de los aspectos que recoge la sentencia son aplicables y no pueden estar sujetos a negociación".

Recordó además que "la sentencia que ahora debe aplicar el Ayuntamiento anula unos acuerdos suscritos por el PP en el Ayuntamiento y que fueron impugnados por el delegado del Gobierno, en aquel momento también del Partido Popular".

En definitiva, el equipo de Gobierno afirma que "hay una total voluntad de diálogo y de llegar a acuerdos concretos", y estos acuerdos siempre tendrán que enmarcarse dentro del respeto escrupuloso a la legalidad, máxime cuando hay una sentencia que cumplir y, sobre todo, "para no incurrir en el mismo problema que el acuerdo de 2002, que fue impugnado y finalmente ha habido sentencia en contra", sostienen.