CIUDAD REAL, 28, (EUROPA PRESS)
El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, aseguró hoy en Alcázar de San Juan (Ciudad Real), advirtió hoy de que con la aplicación del Plan Especial del Alto Guadiana no se permitirán nuevas perforaciones, y pidió a los agricultores colaboración, ayuda y responsabilidad. Según informó en nota de prensa la Junta, Barreda hizo estas declaraciones momentos antes de la reunión del Consorcio del PEAG, tras un encuentro con organizaciones profesionales agrarias y representantes de los regantes. En este contexto y tras reconocer que este Plan es la única solución para regularizar un problema ya de por sí complicado y antiguo, advirtió que al hilo de este planteamiento no se podrán hacer "desmanes, ni nuevas perforaciones".
Según Barreda, los agricultores del Alto Guadiana ya tienen respuestas a sus "angustias y preocupaciones" pues el Consejo de Administración del Consorcio del Plan Especial del Alto Guadiana, PEAG, estudia la regularización de los cultivos leñosos y hortícolas y la compra de derechos de 60.000 hectáreas en el caso de los leñosos.
"Teníamos que tomarnos en serio esta situación que nos conducía a una catástrofe medioambiental y ecológica y conseguir la regeneración hídrica de los acuíferos", explicó el presidente de Castilla-La Mancha que compareció ante los medios de comunicación acompañado por la vicepresidenta segunda del Gobierno, Mª Luisa Araújo, y la consejera de Agricultura, Mercedes Gómez.
En este sentido, indicó que esta decisión es el principio de la solución de muchos problemas agrarios porque cuenta con recursos y se llevará a cabo con el consenso, apoyo y unanimidad de todo el sector que apoya el PEAG y al Gobierno autonómico.
Del mismo modo, Barreda pidió a los agricultores colaboración, ayuda y responsabilidad en esta actuación dado que se trata de una decisión del Consorcio del PEAG que es, a su vez, un instrumento de co-gestión del agua del Alto Guadiana entre el Gobierno de España y el Gobierno de Castilla-La Mancha.
En este orden de cosas José María Barreda advirtió de que el PEAG no solamente es un plan agrario, que lo es, sino también medioambiental y de desarrollo sostenible pues supondrá la diversificación productiva de la comarca, fortalecerá los rebosaderos del acuífero que facilitaban el sistema lagunar de La Mancha húmeda y todo ello sin merma en al renta de los agricultores.
El PEAG, con un presupuesto de más de 3.000 millones de euros, persigue la regeneración de los acuíferos sobreexplotados, con la consecuencia añadida de preservar el Parque Nacional de Las Tablas de Daimiel y de recuperar los recursos lagunares de la zona, pero haciéndola compatible con garantizar la renta de los agricultores, la atención a las necesidades de abastecimiento y el desarrollo de la actividad económica y social.
Además con la aplicación del PEAG se contribuye al ahorro de más de 200 hectómetros cúbicos de agua, con el fin de mantener los equilibrios hídricos de la zona. Éste es el consumo anual de una ciudad de más de dos millones de habitantes.
La falta de actuación para frenar la sobreexplotación de los acuíferos provocaría, a medio plazo, la imposibilidad de extracciones y la dificultad de abastecimiento por escasez de agua, además de problemas de calidad.