La Junta confía en que el Ministerio de Vivienda participe económicamente en el Plan de Vivienda Pública-Privada

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   TOLEDO, 7 May. (EUROPA PRESS) -

   El vicepresidente primero del Gobierno regional, Fernando Lamata,  se mostró hoy confiado en que el Ejecutivo central, por medio del Ministerio de Vivienda, participe económicamente en el Plan de Vivienda Pública-Privada que se va a poner en marcha en Castilla-La Mancha, y que lo haga en función de las necesidades del plan. No obstante, matizó que esa participación "tendrá que valorarse en función de su desarrollo".

   A preguntas de los medios, durante la rueda de prensa que ofreció para dar cuenta de los acuerdos aprobados por el Consejo de Gobierno de la presente semana, Lamata se pronunció de esta manera sobre el plan de vivienda pública-privada que se firmará el próximo lunes, con el respaldo de agentes sociales y el sector de la construcción, y con la implicación de la ministra de Vivienda, Beatriz Corredor, y que tiene como objetivo reactivar la economía regional.

   Según Lamata el Gobierno de España también se compromete en su aplicación, desarrollo y evaluación, "pues la ministra ha recibido muy bien este plan, y se comprometió a adoptar algunas de las características que contempla".

   Aunque de momento, apostilló, hay un compromiso de implicarse en el plan, compartir la propuesta de la Junta de vivienda publica- privada, que permitirá garantizar a los constructores que no van a perder su inversión, al tiempo que se facilita a los castellano-manchegos, sobre todo a los más jóvenes, acceder a una vivienda.

   En otro orden de cosas, y también a preguntas de los medios, sobre un informe que apunta que Castilla-La Mancha es la región con más número de viviendas construidas en 2006 sin vender, Fernando Lamata indicó que ese parque de vivienda sin vender se sitúa sobre todo en los márgenes con Madrid, como La Sagra o el Corredor del Henares, y va destinado sobre todo a los madrileños.

   "Se trata de una vivienda de precio libre que el promotor tendrá que ver cuál es el precio adecuado en cualquier momento para venderla, y por tanto no se incluye en el plan, salvo que en algún caso coincidiera que están ubicadas en las ciudades donde se demanda construcción de viviendas, se ajustara a las características de los demandantes y se pusiera a su disposición", matizó el también portavoz regional.

   "Pero la mayoría de esta viviendas sin vender se ubican en zonas donde no hay demanda castellano-manchegos, sino de madrileños, que es otro tipo de mercado y vivienda", alegó Lamata quien afirmó que el Gobierno regional está facilitando el funcionamiento del mercado inmobiliario, estableciendo unas condiciones "accesibles" tanto para el comprador como para el constructor, y "en principio no hay previsión de coste ni para la Junta ni para el Gobierno de España".

   14 MILLONES DE EUROS EN CARRETERAS

   De otro lado, el portavoz regional recordó que el Consejo de Gobierno de la presente semana aprobó una inversión de 14 millones de euros en carreteras de la red autonómica, medida que se incluye en las acciones del Gobierno autonómico para reactivar la economía regional, y que según detalló Lamata son 300 millones de euros los invertidos desde febrero, sobre todo en obra de carretera y también en otros servicios, que benefician sobre todo al sector de la construcción, el más afectado.

   Preguntado sobre si el Gobierno regional tiene estimado el tiempo que pueden tardar en hacer efectos estas medidas, señaló que el efecto es "inmediato, porque al poner en marcha una obra implica la contratación de personas", pero el reflejo en la economía tiene efecto más a largo plazo, "pues hablamos de una economía que se engloba en el marco nacional e internacional".

   "Tardarán por tanto unos meses, y por ello debemos atender a la informaciones del Banco de España o de Vicepresidencia Segunda, que apunta a un crecimiento del 2 por ciento, lo que implica una desaceleración del crecimiento previsto", dijo Lamata.

   Así, defendió que recuperar el crecimiento del 3 por ciento que permitía absorber toda la demanda de empleo, puede tardar en torno a dos años, según las estimaciones de los expertos, y "nosotros nos ajustaremos a esas estimaciones para definir nuestras estrategias".

   "Por eso empezamos a lanzar planes de choque", dijo Lamata, que  añadió que en un año se han creado 24.000 empleos, y que aunque el mercado de trabajo se mantiene, "no es suficiente para atender a la demanda de empleo que hay en la región". "Hay más personas que llegan al mercado de trabajo, porque llegan por vez primera o porque están perdiendo su empleo en los sectores más afectados por la desaceleración", concluyó.