TOLEDO, 16 Ene. (EUROPA PRESS) -
El vicepresidente primero y portavoz de la Junta, Fernando Lamata, resaltó hoy la intención de que el Plan Especial del Alto Guadiana (PEAG) que se aprobó el viernes en Consejo de Ministros, sea "un verdadero plan de desarrollo integral" de la zona de La Mancha, por lo que, recordó, se han dado instrucciones a los consejeros relacionados con este Plan "para poner inmediatamente en marcha las medidas que contempla".
En la rueda de prensa para dar cuenta de los acuerdos del Consejo de Gobierno, Lamata recordó que se ha trabajado mucho "de la mano" de las organizaciones agrarias, regantes, industriales y ayuntamientos para alcanzar un consenso en este proyecto, que debe poner en movimiento toda la capacidad económica y social de desarrollo de la región con el objetivo de poder garantizar agua suficiente para las actividades agrícolas de la zona de La Mancha.
Así, "este plan nos va a permitir garantizar ese suministro", aseguró Lamata, quien consideró que el proyecto, que ha conseguido 3.000 millones de euros en inversión para la zona, totaliza una inversión prevista de 5.500 millones de euros y por tanto, "es un motor económico de gran magnitud para toda La Mancha, un desarrollo integral de esta zona", por lo que hay que "ponerlo a funcionar".
Aseveró el vicepresidente primero que "se ha conseguido mucho, pero ahora empezamos una nueva etapa que es la de coordinar perfectamente con la Administración del Estado la puesta en marcha de todas las medidas que contempla", y para ello, anunció, se va a constituir de forma inmediata un Consorcio.
Al respecto, indicó que esta misma tarde, el presidente de la Confederación Hidrográfica del Guadiana, Enrique Calleja, y las consejerías relacionadas con el PEAG se reunirán para abordar las medidas del Plan y preparar el Consorcio, ver las medidas de compra de derechos de agua y el establecimiento de las nuevas adjudicaciones en la zona para poner en marcha los proyectos de desarrollo industrial y económico.
Así, apuntó Lamata, se pretende que el Plan sea también uno de los ejes vertebradores de desarrollo de La Mancha, "donde desarrollan su vida y futuro alrededor de 500.000 personas", por lo que se trata de un territorio con un valor demográfico y económico clave para la región.
