TOLEDO, 4 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha ha autorizado esta semana una inversión dedicada a reforzar la atención a la ciudadanía en el Museo Paleontológico y el Museo de las Ciencias, ambos ubicados en la ciudad de Cuenca, y otra que tiene como objetivo la contratación de arquitectos y arqueólogos para mejorar la rapidez en la resolución de los trámites arqueológicos y patrimoniales.
La portavoz del Gobierno castellanomanchego, Blanca Fernández, ha explicado este miércoles en rueda de prensa que, en concreto, a la mejora de la atención en los espacios museísticos se destinarán 774.797 euros, mientras que a la contratación de arquitectos y arqueólogos se dedicarán 428.727 euros en dos años.
Con respecto a la primera de estas medidas, Fernández ha comentado que estos dos son museos "muy exitosos" de la región y que suponen "un revulsivo para la economía" de la ciudad conquense, ya que ambos cuentan con, aproximadamente, 80.000 visitantes.
Por ello, esta inversión tiene como idea "mejorar el servicio de atención al público" en ambos espacios, con lo que se pretende conseguir que la cultura también sirva en Cuenca para "luchar contra la despoblación y el reto demográfico" haciendo que sea un atractivo turístico.
REDUCIR EL TIEMPO DE LOS TRÁMITES "A LA MITAD"
En segundo lugar, la portavoz ha detallado que el Consejo de Gobierno ha aprobado la contratación de cinco profesionales, tres de la arquitectura y dos de la arqueología, para "reforzar" las plantillas de las delegaciones provinciales y así agilizar los expedientes sujetos a algún condicionante o informe sobre el patrimonio o de tipo arqueológico, con la intención de reducir "a la mitad" la duración de estos trámites.
Blanca Fernández ha reconocido que en este tipo de expedientes "los tiempos a veces son demasiado lentos", por lo que el Gobierno de Castilla-La Mancha busca con esta acción "preservar el patrimonio y animar a la inversión en el territorio".
"Estos expedientes son muy heterogéneos. No es lo mismo una licencia de obra en una vivienda en zona de protección arqueológica que una cata arqueológica, que puede tardar años. La conservación del patrimonio no tiene que ser incompatible con el desarrollo o las inversiones, que tienen que ser cuidadas y ágiles al mismo tiempo, especialmente cuando se trata de rehabilitación de vivienda con algún tipo de protección", ha apuntado.
La portavoz ha señalado que los arquitectos contratados tendrán competencias en informes, valoración de medidas, mientras que los arqueólogos evaluarán el impacto que suponga una inversión en el patrimonio arqueológico, dedicándose también a valorar las intervenciones arqueológicas y a elaborar inventarios arqueológicos en los municipios.
