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CIUDAD REAL, 17 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Plan de Intensificación de la Vigilancia del Tráfico (Invitra) en la carretera N-401 (Madrid-Ciudad Real), puesto en marcha durante el año 2013, ha propiciado que se reduzcan a la mitad los accidentes con víctimas en esta vía.
Según informa la Delegación del Gobierno en nota de prensa, entre las conclusiones de la aplicación de este Plan también se detrae que se ha eliminado el único punto negro que existía en la provincia, situado en el punto kilométrico 150,300 de esta vía consiguiendo, a su vez, que no aparezcan en otras vías de comunicación.
Del mismo modo, la siniestralidad vial de la N-401 durante el año 2013 ha disminuido en más de un 22 por ciento con respecto al año anterior, duplicándose el porcentaje de descenso respecto al período precedente, que fue de un 10%. Esto ha supuesto pasar de veinte accidentes en 2011 a catorce en 2013.
EFECTIVOS MOVILIZADOS
Durante este Plan se han realizado 2.326 patrullas, 3.229 pruebas de alcoholemia, 35 positivas, y dos pruebas de drogas positivas. Además, se ha detectado 2.491 excesos de velocidad, 12 infracciones de transportes detectadas y denunciadas, y 514 Otras infracciones detectadas y denunciadas: 514.
En cuanto a la siniestralidad vial, se han registrado un total de catorce siniestros. En ocho de ellos se produjeron daños personales, con el resultado de tres fallecidos y en otros ocho cuatro heridos graves y diez leves.
En los otros seis siniestros sólo se produjeron daños materiales, mientras que durante los meses de marzo, julio, agosto, septiembre, noviembre y diciembre no se ha registrado ningún accidente de circulación.
LA SINIESTRALIDAD
En cuanto a las características de la siniestralidad, la mitad de los accidentes se han producido en días festivos, siendo la distracción o desatención en la conducción la causa de cinco de ellos.
Cuatro de los accidentes consistieron en salidas de vía, mientras que las colisiones fueron cinco y un total de 15 de los vehículos implicados han sido turismos.
Este plan se puso en marcha tras la realización en el año 2013 de un mapa de riesgos de siniestralidad vial de las carreteras de la provincia de Ciudad Real, que dio como resultado que la N-401 presentaba un nivel de riesgo que era de los mayores de la provincia, situándose también en dicha vía el único punto negro de las carreteras ciudadrealeñas.
Para conseguir el objetivo ahora alcanzado se aumentó la vigilancia del tráfico, intensificando los controles de velocidad, la vigilancia de infracciones relativas a adelantamientos y los controles preventivos de alcoholemia y drogas.
Se prestó una especial atención a las infracciones relativas a excesos de velocidad, uso del teléfono móvil, tiempos de conducción y descanso, conducción negligente o temeraria, conducción bajo los efectos de alcohol o drogas y control de los dispositivos de seguridad pasiva.
