TOLEDO, 7 May. (EUROPA PRESS) -
La portavoz del Grupo Parlamentario Popular en las Cortes de Castilla-La Mancha, Ana Guarinos, acusó hoy al presidente regional, José María Barreda, y a los dirigentes socialistas de la región de gobernar de espaldas a las instituciones democráticas y de manifestar "desprecio" hacia las mismas, al tiempo que lamentó que no se haya contado con los 'populares' para rubricar el pacto por la vivienda el próximo lunes.
En rueda de prensa, Guarinos mostró su preocupación por la forma de gobernar del PSOE en Castilla-La Mancha en dos temas fundamentales: el agua y la vivienda. En este primer aspecto, la portavoz 'popular' lamentó que el Gobierno regional muestre "signos de rendición" en relación a un derecho de todos los castellano-manchegos como es la utilización de agua.
Según indicó, el futuro y el desarrollo de Castilla-La Mancha dependen del agua, y por ello subrayó que el Gobierno regional debería defender a "capa y espada" los derechos de los ciudadanos fuera de la región. Asimismo, recordó que la caducidad del trasvase Tajo-Segura en 2015 fue una iniciativa aprobada por unanimidad en las Cortes regionales.
Prosiguió pidiendo a Barreda que defienda el cese de esta "hipoteca", y que no niegue lo recogido en la reforma del Estatuto de Autonomía de Castilla-La Mancha antes de que se haya iniciado la tramitación del mismo en las Cortes Generales. Se preguntó con qué legitimidad actúa así el Gobierno socialista y le recordó que las decisiones en torno al Estatuto no se pueden tomar de forma unitaria.
En este sentido, sostuvo que si se quieren plantear cuestiones en relación al Estatuto de Autonomía, el grupo de trabajo constituido para su reforma tendría que ser el que decida si es o no posible. A su juicio, un gobierno tiene que gobernar respetando a las instituciones democráticas, la sociedad y el Parlamento regional.
Respecto al tema de la vivienda, la portavoz del Grupo Popular aludió al Pacto por la Vivienda anunciado el pasado 17 de abril por el presidente de Castilla-La Mancha en las Cortes regionales, y consideró que un acuerdo de estas características tendría que negociarse con los ciudadanos y no de espaldas a las instituciones.
Ante el anuncio de Barreda de que ese "gran pacto" se firmará el próximo lunes con la ministra del ramo, Beatriz Corredor, en el que también participarán todas las organizaciones sindicales y empresariales de la región, Guarinos destacó que "parece que el PP queda excluido de este pacto" y lamentó que Barreda desprecie ahora al Parlamento a la hora de rubricar esta iniciativa.
"NO HACER DEMAGOGIA".
Reprochó al Ejecutivo que a fecha de hoy los ciudadanos no conozcan nada más sobre lo que el Gobierno ha denominado viviendas de iniciativa público-privada y exclamó que con este tema "no se puede hacer demagogia". Recordó que el PP ha pedido la comparecencia del consejero de Ordenación del Territorio y Vivienda, Julián Sánchez Pingarrón, y ésta todavía no se ha producido.
"¿Qué intereses puede haber detrás de este pacto, que el Gobierno no quiere con luz y taquígrafos informar"?, se preguntó Guarinos, quien exigió al Gobierno socialista que lleve el Pacto por la Vivienda a las Cortes. Así, Guarinos mostró la voluntad del PP de dialogar, pero no de acatar lo que imponga el Gobierno. "No queremos que se nos imponga nada, sino queremos negociar", apuntó.
Finalmente, tildó el Pacto por la Vivienda de "extraño" y se preguntó qué intereses existen detrás del mismo. No obstante, cuestionó también dónde están las 10.000 viviendas de protección oficial (VPO) que tendrían que estar ya construidas, y sí el Gobierno va a comprar todas las viviendas que los promotores no consigan vender.