CUENCA 29 Ene. (EUROPA PRESS) -
Las sustracciones de teléfonos móviles en Cuenca aumentaron un 40 por ciento en 2013, a pesar de haber experimentado un descenso del 4 por ciento en las infracciones penales en general, detectando un incremento de los intentos de fraude a los seguros por lo que durante el pasado año fueron detenidas 4 personas en la capital conquense.
Así lo han explicado el subdelegado del Gobierno en Cuenca, Ángel Mariscal, el comisario jefe de la Policía Nacional en Cuenca, Manuel Laguna, y presidente del Colegio de Mediadores de Seguros José Manuel Auñón, tras la reunión que han mantenido este miércoles para abordar el problema de los intentos de fraude al seguro.
Mariscal ha explicado que las cuatro personas detenidas por denuncias falsas en 2013 suponen el incremento de un caso respecto al año anterior y ha advertido de las consecuencias que supone este tipo de delitos que conllevan la apertura de una reseña policial con sus respectivos antecedentes y un juicio al que se enfrentan a penas de entre 6 meses y un año de cárcel. La gente que no es consciente de esas consecuencias intenta retirar la denuncia pero ya es tarde aunque no se haya logrado cobrar la indemnización del seguro, ha afirmado.
El comisario jefe ha explicado que el aumento del robo de los móviles es consecuencia lógica del mayor número de estos aparatos en el mercado y que por su valor, superior a los 400 euros. Su sustracción es considerada como delito.
Laguna ha explicado que en muchas ocasiones estos aparatos los manejan niños que, ante el temor a reprimendas de los padres por perderlos, dicen que se los han robado sin ser conscientes que ahora existen medios técnicos que permiten hacer seguimiento de estos dispositivos y es más fácil probar los intentos de fraude con estos aparatos.
Por su parte, Auñón ha incidido en este aspecto asegurando que la crisis agudiza el ingenio y hay una tendencia creciente a reclamar todo lo posible a las compañías ayudándose de Internet y de los foros para encontrar información de cómo hacerlo.
En este sentido, ha detallado que las compañías calculan que entre un 25 y un 30 por ciento de los siniestros están relacionados con intentos de fraude, aunque en muchos casos no se puedan probar estas estafas a los seguros donde los usuarios intentan evitar a toda costa la palabra hurto, conscientes de que éstos no entran en las pólizas de seguros por lo que intentan denunciar el robo con fuerza para que lo cubra la compañía.
Es el caso de dos ejemplos de las detenciones producidas en la capital, donde en el primero de ellos un conductor tras ocasionar daños a varios vehículos con su coche al conducir bajo los efectos del alcohol intentó denunciar el robo de su coche. Otro de los casos denunció que dos mujeres de etnia gitana lo habían abordado en la calle para robarle el móvil comprobando más tarde que era falso, ha explicado el comisario.