TOLEDO 13 Jun. (EUROPA PRESS) -
El jurado popular consideró hoy a Sócrates F.S., por unanimidad, culpable de un delito de homicidio, por la muerte de Juan Carlos Rodríguez, de 35 años, en el interior del bar 'La churrería' de El Casar de Escalona (Toledo) en la madrugada del 6 de noviembre de 2006.
El jurado, cuyo presidente leyó el veredicto pasadas las 13.30 horas de hoy, consideró que no ha quedado probado que el acusado cometiera los hechos con alevosía, requisito imprescindible en un delito de asesinato, lo que obligó a las partes a rebajar las penas solicitadas.
En su veredicto, el Tribunal del jurado considera culpable a Sócrates F.S. por las manchas de sangre aparecidas en su ropa y en el cuchillo --hallado cerca del domicilio donde vivía--, porque reconoció que había tenido una agresión al llegar a casa, porque varios testigos presenciales lo incriminaron y porque otros, aunque no vieron la agresión, sí vieron lo que ocurrió antes y después.
El Ministerio Fiscal, que inicialmente pedía la pena de 20 años por un delito de asesinato, ha solicitado una pena de 14 años de prisión por uno de homicidio y 70.000 euros de indemnización. La acusación particular, por su parte, solicitó una pena de 15 años de prisión y una indemnización de 275.000 euros, y la defensa pidió para su patrocinado cuatro años de prisión.
Los hechos, juzgados desde el pasado lunes en la Audiencia de Toledo, sucedieron sobre las 23.45 horas del día 6 de noviembre de 2006, cuando el acusado se encontraba trabajando como camarero en ese bar, propiedad de su prima, donde también se encontraban dos hombres, ambos amigos, tomando unas copas, que iniciaron varias discusiones.
Siendo recriminados por el acusado y otros clientes que había en el bar, uno de los dos hombres reaccionó airadamente, enfrentándose al acusado y rompiendo diverso mobiliario existente en el bar, situación que motivó que el acusado cogiese una espada que había detrás de la barra, con la que intentó poner orden y amedrentar al hombre, tratando este de arrebatársela sin conseguirlo.
En un momento dado, el acusado salió de la barra del bar con un cuchillo jamonero de unos 34 centímetros de hoja y de un modo "inopinado y sorpresivo" y sin ninguna posibilidad de defensa por parte de la víctima, y con la clara intención de acabar con su vida, le propinó dos puñaladas al hombre, una en el hemitórax izquierdo y otra en el hemitórax derecho, que llegó a atravesarle el pulmón derecho.
El acusado, en prisión por este causa desde el día 9, fue detenido en el interior de la vivienda de su prima, con la ropa manchada de sangre. Al fallecido, de 25 años de edad, solo le consta como familiar su madre, con la que no convivía.