VALLADOLID, 27 Sep. (EUROPA PRESS) -
La consejera de Empleo e Industria, Ana Carlota Amigo, se ha felicitado por que Castilla y León, pese a la pandemia, ha alcanzado el mejor dato de afiliados a la Seguridad Social de la última década para un mes de agosto, con un incremento superior a los 41.000 desde comienzos del año, hasta situar la cifra en los 936.902 inscritos, y espera que el desempleo se sitúe en niveles prepandemia al finalizar el mes de septiembre.
Así lo ha subrayado la consejera durante su comparecencia esta tarde en la Comisión de Empleo e Industria de las Cortes, donde ha dado cuenta de lo realizado por su departamento en los dos primeros años de legislatura y en la que, entre otros datos, ha incidido en que más de 30.000 castellanos y leoneses perdieron su empleo entre marzo de 2020 y enero de 2021 como consecuencia de la pandemia, pero el ritmo de recuperación, superior a la media nacional, ha permitido que cerca de 25.000 desempleados hayan abandonado las listas del paro desde el mes febrero.
A esta recuperación, ha señalado la consejera, han contribuido las medidas llevadas a cabo por la Junta de Castilla y León, tanto a través de las políticas activas de empleo como a través de las medidas extraordinarias que se han puesto en marcha para paliar las consecuencias de la pandemia y apoyar la recuperación de los sectores más perjudicados.
Así, para contener el impacto laboral y económico de la pandemia entre trabajadores, autónomos y pequeñas empresas, la Consejería de Empleo e Industria ha destinado más de 100 millones de euros en ayudas directas a estos colectivos.
Estas ayudas se han articulado a través de tres grandes programas: el Plan de Medidas para la Protección a los Trabajadores y Trabajadoras, a las Empresas y a las Familias con motivo de la Crisis de la COVID-19, que ha distribuido ayudas por valor de 18.778.698 euros entre 26.598 desempleados, trabajadores, empresas y autónomos; el Plan de Choque para el Empleo, con ayudas de 61.480.245 euros y 18.697 beneficiarios; y finalmente, el programa de ayudas COVID-19 para autónomos y trabajadores por cuenta propia que está ejecutándose en estos momentos con un total 8.438 solicitudes y un presupuesto estimado de 21 millones de euros.
Las ayudas canalizadas a través de estos programas, tal y como ha subrayado Amigo, se han dirigido al mantenimiento del empleo en las pymes de Castilla y León mediante la financiación de cuotas a la seguridad, a subvencionar la adquisición de equipos de protección colectiva o individual frente a la COVID-19, a incentivar la contratación de trabajadores despedidos durante la pandemia, a apoyar la reincorporación de los autónomos después del cese de actividad a raíz de las restricciones, a fomentar el consumo en el comercio de proximidad y apoyar la creación de plataformas de venta online.
Así mismo, la Consejería de Empleo e Industria ha habilitado ayudas económicas para los desempleados sin ningún tipo de prestación y para complementar las rentas de más de 15.000 trabajadores en ERTE.
PLANES LOCALES DE EMPLEO
Además, la Consejería ha reorientado durante el pasado año 2020 sus políticas activas de empleo con el fin de reforzar los programas de fomento del empleo. Estos programas han permitido la creación de 8.747 empleos durante el pasado, a los que hay que sumar las 630 iniciativas de autoempleo que se han financiado a través del Servicio Público de Empleo de Castilla y León.
Entre estos programas cabe destacar el Plan de Empleo Local y Rural, que permiten luchar contra el desempleo mediante la contratación directa de desempleados para la prestación de servicios y la realización de obras de interés general, a través de las entidades locales.
A lo largo de 2020 se han invertido más de 78 millones de euros para contratar a más de 7.500 desempleados por parte de ayuntamientos y diputaciones. Del mismo modo, el Plan de Empleo Local de este año, convocado en su totalidad, cuenta con un presupuesto de 97 millones de euros con el fin de promover la creación de cerca de 10.000 puestos de trabajo en el conjunto de la Comunidad.
LA HERRAMIENTA DE LA FORMACIÓN
Otra de las grandes líneas de actuación de la Consejería de Empleo e Industria se ha centrado en la formación para el empleo, que cuenta este año con una inversión de 126 millones de euros a través del Plan de Empleo de Castilla y León, estando ya convocados la práctica totalidad de los programas.
Paralelamente, se está realizando una nueva revisión del catálogo de especialidades formativas para dar respuesta a las necesidades de cualificación profesional que requieren las empresas de la Comunidad, capítulo en el que se ha puesto en marcha el programa 'Reto Castilla y León Cibersegura', dotado con 20 millones con el doble objetivo de impulsar la transformación digital segura y aprovechar las oportunidades de empleo vinculadas a la ciberseguridad y a la digitalización. El objetivo es llegar a 20.000 alumnos, estando ya convocadas 790 acciones formativas, 675 en competencias digitales y 115 en ciberseguridad.
RESUELTOS 30.000 ERTE CON 198.000 AFECTADOS
Durante su comparecencia, la consejera ha subrayado el esfuerzo realizado durante la pandemia para adaptar los servicios a la situación sanitaria, articulando un procedimiento ágil y eficaz para la resolución de los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) desde de la Dirección General de Trabajo y Prevención de Riesgos Laborales, que resolvió más de 30.000 ERTE con más de 198.000 trabajadores afectados solo en el periodo comprendido entre marzo y octubre de 2020.
En la misma línea, la Consejera ha puesto el énfasis en el Servicio Público de Empleo de Castilla y León, que ha llevado a cabo una profunda transformación digital que ha permitido prestar atención telemática a trabajadores y empresas.
El Ecyl ha generalizado sus servicios a través de la oficina virtual, ha puesto en marcha la teleformación, ha impulsado una nueva app que cuenta con más de 170.000 usuarios y que ha sido utilizada para realizar más de medio millón de consultas y ha puesto en marcha un nuevo servicio de ofertas de empleo de forma geolocalizada sobre el mapa.
Asimismo, y con el fin de mejorar la conexión entre las empresas y los demandantes de empleo, se ha puesto en marcha un nuevo servicio de prospección laboral que cuenta con un centenar de prospectores que ya han realizado durante los primeros seis meses de este año cerca de 50.000 visitas personalizadas a las empresas de Castilla y León.
Este contacto directo permite conocer la realidad y las necesidades de las empresas en materia laboral y al mismo tiempo informar de los servicios e incentivos con la cuenta la Consejería de Emplea para mejorar la formación y apoyar la creación y el mantenimiento del empleo.
