Óscar Puente reprocha que el anterior equipo de Gobierno "ocultó información" sobre el embargo que condiciona toda la situación
El alcalde apunta que, a causa de la deuda, se resolverá el convenio de cesión del pabellón Pisuerga y sus terrenos adyacentes
VALLADOLID, 23 Jun. (EUROPA PRESS) -
El alcalde de Valladolid, Óscar Puente, ha confirmado este martes que el Ayuntamiento no sufragará económicamente al Club Baloncesto Valladolid por medio de subvenciones municipales porque el informe de la Intervención señala que "no hay más salida", pues las cantidades quedarían bloqueadas primero por una deuda con la Fundación Municipal de Cultura y en según término por el embargo impuesto en noviembre de 2013 por el impago de las cantidades comprometidas con la Agencia Tributaria.
Así lo ha explicado el primer edil socialista en una rueda de prensa en la que ha comparecido junto al concejal de Educación, Participación y Deportes, Alberto Bustos, y en la que se ha explicado la situación económica del Club y de la Fundación Baloncesto Valladolid, con una deuda conjunta que en la temporada 2014-2015 ha alcanzado los 6,5 millones de euros después de haber llegado a situarse en 8,1 millones un año antes.
A juicio de Óscar Puente, las posibles soluciones de futuro para el CB Valladolid "saltaron por los aires" la pasada semana cuando los nuevos responsables municipales y, según aseguró, el propio presidente del club, Sunil Bhardwaj, conocían la existencia del embargo impuesto en noviembre de 2013 por la Agencia Tributaria debido al impago de la deuda reconocida en el convenio del concurso de acreedores al que fue sometida la entidad en el año 2011.
En primer lugar, la Fundación Baloncesto Valladolid, a cuyo nombre se han realizado las últimas subvenciones, no podría recibir nuevas aportaciones en tanto no haga frente a la deuda que reclama la Agencia Tributaria o acuerde con ella un fraccionamiento de la misma.
De este modo, Puente ha explicado que si el Consistorio aportase una subvención al club, la cantidad --el presupuesto municipal de este año dejaría liberados para ello 254.000 euros-- debería destinarse en primer lugar a compensar la deuda existente con la Fundación Municipal de Deportes (FMD) --103.423 euros-- y la cantidad sobrante, algo más de 100.000 euros, iría a pagar parte de la deuda con la Agencia Tributaria --542.327,7 euros--, la Tesorería de la Seguridad Social --22.788 euros-- y los juzgados de lo Social --325.659 euros--.
Dentro de la deuda con la FMD se incluye el impago por la utilización del pabellón polideportivo Pisuerga en el que juega sus partidos el CB Valladolid, por lo que Óscar Puente ha advertido de que constituye una causa para resolver el convenio de cesión de estas instalaciones así como de la parcela adyacente en la que el actual presidente presentó un proyecto de inversión empresarial que podría dar una solución al club.
REINTEGRO DE LA SUBVENCIÓN DE 2013
Asimismo, ha recordado el regidor, está pendiente el reintegro de los 390.000 euros de la última subvención que concedió el Ayuntamiento a la Fundación, en el año 2013, ya que se acordó la reclamación de la misma al considerarse que la entidad no había cumplido las condiciones exigidas.
Por ello, y ante el informe de la Intervención municipal, el regidor vallisoletano considera que el Consistorio no puede continuar sufragando a la entidad ni a la Fundación en concepto de subvención. "No tiene más salida", ha aseverado Puente, que ha ironizado con que "si alguien tiene otra idea" el equipo de Gobierno estaría "encantado de escucharla".
Puente ha explicado que se ha informado de la decisión al presidente del CB Valladolid y ha asegurado que ya conocía la relación económica entre Ayuntamiento y club tras mantener varias reuniones la semana pasada con representantes municipales acompañados por personal de la Intervención y de la Secretaría General.
El alcalde de Valladolid ha añadido que el marco legal de los procesos concursales tiene "unas determinadas consecuencias" y establece "causas de liquidación muy claras".
Según el regidor vallisoletano, el Ayuntamiento por el momento no se ha preocupado por establecer un "nexo causal" de las actuaciones que se han llevado a cabo en el club y en el Consistorio con el resultado, aunque sí que se ha referido a que el anterior equipo de Gobierno dirigido por Francisco Javier León de la Riva (PP) no fue transparente y "ocultó información" sobre el embargo.
El actual alcalde ha recalcado que la orden de embargo por parte de la Agencia Tributaria se comunicó al Ayuntamiento y al Club en la fecha correspondiente --22 de noviembre de 2013--, pero tanto los ediles del nuevo equipo de Gobierno, entonces en la oposición, como el actual presidente de la entidad que llegó al cargo en agosto de 2014 aseguran haber tenido conocimiento del mismo hasta hace una semana.
RELACIÓN "MUY OPACA"
Por su parte, Alberto Bustos ha lamentado la "muy opaca" relación que ha mantenido el anterior equipo de Gobierno con el CB Valladolid, algo de lo que ha culpado del desenlace de la situación. "Todo ha ido a peor por la falta de claridad y de transparencia", ha apuntado.
El embargo procede de las cantidades comprometidas por el club en el convenio por el cual se cerró el Concurso de Acreedores que se declaró en 2010, en el que de la deuda inicial que ascendía a 7,9 millones de euros se aceptaron quitas que dejaban la cantidad en 5,4 millones. De ellos, 542.327 euros correspondían a la Agencia Tributaria.
"Lo realmente grave", a juicio de Óscar Puente, es que de los 5,4 millones de euros de deuda a la salida del concurso, se pasó en medio año a 7,3 millones --incluido un crédito por valor de 915.000 euros solicitado por la Fundación Baloncesto Valladolid--. Al concluir la campaña 2012-2013 la deuda era de 7,9 millones, mientras que un año después llegaba a los 8,1 millones.
El último dato conocido, correspondiente al presupuesto del club para la temporada que concluye en términos contables el próximo 30 de junio es de 6,5 millones de euros, si bien según el alcalde la mayor parte del recorte de la misma corresponde a los 1,5 millones del canon ACB que recuperó el club al descender a la segunda categoría.
La decisión sobre el futuro del Club Baloncesto Valladolid queda ahora en manos de su Consejo de Administración, presidido por Sunil Bhardwaj, y de la Fundación que posee parte de su accionariado. De hecho, Óscar Puente ha apuntado que en la actualidad el Consistorio no tiene representación en el Consejo, pues el pasado 12 de junio --un día antes de la constitución de la nueva Corporación municipal-- se cesaba al representante del anterior equipo de Gobierno y ahora sería necesario nombrar a una nueva persona.
En todo caso, Óscar Puente ha defendido que "está por ver" que la responsabilidad patrimonial si el club termina disuelto no recaería plenamente en el Ayuntamiento, ya que según le consta sólo tiene el "6 ó 7 por ciento" de la propiedad. No obstante, Alberto Bustos ha advertido de que en los últimos cuatro años se intentó pedir información sobre el reparto del accionariado y el club no la aportó en momento alguna.
Esta tesis, ha defendido el primer edil, está respaldada por los técnicos municipales, que señalan que ha habido ya procedimientos del Juzgado de lo Social que no han estimado responsabilidad municipal en las actuaciones del club y que en casos similares en otras ciudades tampoco se ha entendido así.
Por último, Óscar Puente y Alberto Bustos han señalado que tienen conocimiento de la intención tanto del actual presidente del CB Valladolid como del exjugador Mike Hansen de crear sendos nuevos clubes de baloncesto en la ciudad. De hecho, ya se ha fijado para este miércoles una reunión con el segundo de ellos.
