SALAMANCA, 9 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Salamanca ha asegurado que la espuma encontrada en el río Tormes, junto al puente Sánchez Fabrés, "no representa un problema de salud pública".
Así lo ha señalado, en la Comisión de Medio Ambiente, la concejal de Salud Pública y Medio Ambiente, María José Fresnadillo, quien ha aportado para esta conclusión el informe elaborado por el Centro de Investigación y Desarrollo Tecnológico del Agua (CIDTA) de la Universidad de Salamanca (USAL).
La edil ha detallado que el CIDTA ha realizado un análisis de las muestras recogidas en cuatro puntos del río los días 23 y 29 de febrero después que hubiera estado lloviendo todo el fin de semana.
Según ha informado el Consistorio, este centro realizó medidas de nutrientes (fosfatos, nitratos, nitritos y amonio), materia orgánica (TOC, oxidabilidad, DQO), materia en suspensión y medidas 'in situ' de los parámetros pH, oxígeno disuelto, turbidez y conductividad, así como de tensioactivos aniónicos (detergentes).
Estos análisis complementan los realizados por Aqualia los días 15 de enero y 23 de febrero, ha apuntado el Ayuntamiento de Salamanca en la información facilitada a Europa Press.
Según el Consistorio, después de analizar estos estudios, "la aparición de la espuma ha estado motivada por el vertido de aguas de lluvia desde los aliviaderos de pluviales al río Tormes debido a las intensas lluvias registradas, observándose un aumento de los valores de fosfatos en las aguas del río".
No obstante, el Ayuntamiento de Salamanca ha indicado que actuará en un aliviadero de aguas pluviales situado entre el Puente Romano y el de Sánchez Fabrés para "aumentar su capacidad de retención de agua y materia en suspensión de las primeras escorrentías".