El Canal de Castilla ofrece en verano paseos en barco, piragüismo y cultura a su paso por Valladolid, Palencia y Burgos

Canal de Castilla (Palencia)
EP
Actualizado: sábado, 28 agosto 2010 14:53

VALLADOLID, 28 Ago. (EUROPA PRESS) -

El Canal de Castilla se presenta durante el verano como alternativa a las vacaciones de sol y playa en virtud de una oferta turística en la que se incluyen paseos en barco, descensos en piragua, rutas de senderismo, cicloturismo, rutas a caballo o diversas actividades culturales en varias de las localidades de Valladolid, Palencia y Burgos por las que atraviesa esta obra hidráulica del siglo XVIII.

Las localidades vallisoletanas de Medina de Rioseco y Cabezón de Pisuerga, las palentinas de Frómista, Herrera de Pisuerga o Alar del Rey y la burgalesa Melgar de Fernamental son sólo algunos de los municipios que durante todo el año, pero especialmente en verano, intentan atraer visitantes con el reclamo del que fue uno de los proyectos más relevantes de la ingeniería civil de la España Ilustrada.

En el fin del Ramal Campos, Medina de Rioseco cuenta con varias atracciones turísticas entre las que figura la embarcación 'Antonio de Ulloa', que ofrece la posibilidad de navegar por las aguas del Canal por 40 euros, la visita a las esclusas cercanas y actividades deportivas como la práctica del piragüismo, cicloturismo o senderismo, según explicaron a Europa Press fuentes del Consistorio.

Además, Rioseco alberga la dársena -una especie de puerto de interior-- más amplia de todo el Canal, con 332 metros de longitud y 52 de ancho, situada en pleno casco urbano, tal y como expone la web www.canaldecastilla.org ,así como de un albergue recientemente inaugurado junto al Centro de Recepción de Viajeros.

El senderismo es la atracción que ofrece Cabezón de Pisuerga, con la Senda del Canal de Castilla, que brinda la posibilidad de disfrutar del entorno natural y patrimonio artístico de la localidad vallisoletana a lo largo de sus alrededor de 12 kilómetros que requieren de dos a tres horas a pie o una en bicicleta para completarlo, como se explica en la web del Ayuntamiento.

Frómista, conocida por la iglesia románica de San Martín, se presenta también como punto de referencia del Canal gracias al conjunto de esclusa cuádruple que alberga y al Museo del Canal. De esta localidad palentina se dice que acoge la disputa entre Fe y Razón, representados por el Camino de Santiago y el Canal, respectivamente.

Herrera de Pisuerga acoge la Presa del Rey y el Centro de Interpretación del Canal, junto a la embarcación turística 'Marques de la Ensenada', que realiza paseos desde el embarcadero de la Presa del Rey hasta la esclusa sexta del Ramal Norte.

Allí, el Centro Deportivo y de Ocio Natural ofrece la posibilidad de alquilar bicis y piragüas, y organiza rutas de senderismo, un servicio que demandan unas 200 personas a lo largo del año, según el presidente del Centro, Carlos Laparte.

Por su parte, Alar del Rey pone a disposición del visitante su nuevo Parque Botánico, que recoge todas las variedades vegetales autóctonas del Canal de Castilla; su dársena de 200 metros de longitud y 30 de anchura, y otras instalaciones anexas tales como el muelle viejo, la retención primera o la cárcel de penados.

Además, el Club Deportivo Tritones del Pisuerga alarense propone distintas opciones de ocio activo para recorrer el Canal en canoa, piragua o bicicleta, o hacer una ruta combinando unos y otros.

Otras localidades palentinas más pequeñas como Villaumbrales, con su Museo del Canal de Castilla, o Villamartín de Campos, que a pesar de no ser municipio ribereño oferta paseos a caballo a orillas del Canal a un precio de 17,20 euros hora, aportan su 'granito de arena' a la valorización del Canal como recurso turístico.

Por último, en Melgar de Fernamental (Burgos) se puede realizar un paseo en la embarcación 'San Carlos de Abánades' en un viaje cuyo principal atractivo radica en observar de cerca el acueducto de Abánades, emplazado sobre el río Valdavia. Además, el día 26 se habilitarán cuatro hidropedales para navegar sobre las aguas del Canal a un precio de cinco euros la hora.

UN POCO DE HISTORIA

El Canal nació con el objetivo de solucionar el problema del transporte de los excedentes agrarios que por entonces producía la meseta castellanoleonesa, principalmente cereales.

Las barcazas, que sólo podían navegar de sol a sol, se movían por un sistema combinado de arrastre y vela, aunque con el paso del tiempo el segundo método desaparecería.