El tráfico está desviado por la N-VI, donde se regula el tráfico para vehículos pesados, articulados y transportes especiales
LEÓN, 5 Mar. (EUROPA PRESS) -
Las obras de reparación del talud de la A-6, afectado por desprendimientos en el kilómetro 418, a su paso por la provincia de León, han comenzado con las labores de conservación integral del tramo y se prevé que mañana se incorporen las primeras máquinas de movimiento de tierras a la cabeza del talud.
De esta manera, la primera fase de los trabajos consistirá en el afianzamiento de la cabeza del deslizamiento para evitar su progresión; el hormigonado de caminos y cunetas; la impermeabilización de posibles vías de entrada de agua a la zona deslizada; las labores de protección de las calzadas actuales; la auscultación; la preparación del camino de acceso a las zonas de trabajo y la realización de sondeos.
Desde el momento en que detectó el movimiento se realizaron actuaciones como el blindando la cabeza del deslizamiento al agua mediante el hormigonado de caminos y zonas de posible infiltración de escorrentías, que acotaron el deslizamiento de ladera, según informó la Subdelegación del Gobierno en León en una nota recogida por Europa Press.
La causa principal de es desmonte parece ser la pluviometría del presente invierno, con la elevación de niveles freáticos, una cuestión a la que hay que sumar la compleja geología de las pizarras fracturadas de este desmonte.
En el momento actual se realizan los trabajos pertenecientes a la primera fase de actuación en la zona y una vez afianzada la cabeza del talud, se iniciará la segunda fase con el descabezado del talud en bancadas en torno a cinco metros que serán reforzadas, sostenidas y drenadas.
Asimismo, se descenderá en la excavación y se retirará el material movilizado en el deslizamiento de ladera, que será contenido con distintas medidas de sostenimiento y drenaje; muros anclados. Además, se ejecutarán distintas bermas hormigonadas.
La tercera fase abarcará los trabajos de construcción de una estructura de protección de ambas calzadas, que se cubrirán a efectos de evitar eventuales incidentes de explotación y en la última fase se realizará la extensión de la instrumentación y la auscultación.
"ESPECIAL DIFICULTAD"
Los trabajos de reparación del talud tienen "especial dificultad"; requieren disponer maquinaria en grandes alturas y en bermas con complejos accesos y se tendrá en cuenta la seguridad y salud, cuestiones que supondrán que el rendimiento sea bajo por el carácter secuencial de las fases de la reparación aunque se trabaje en turnos continuados.
Además, las condiciones meteorológicas podrían conllevar la necesidad de efectuar restricciones en algunos tajos más complejos por razones de seguridad y salud. Los tratamientos a realizar dependerán del estado del talud en cada zona, que sólo se conocerá de manera exacta al avanzar el retaluzado.
Por este motivo y con el fin de garantizar la seguridad de los usuarios, el pasado día 28 se implantó un desvío de tráfico en ambos sentidos de la autovía del Noroeste (A-6) entre los puntos kilométricos 415 (enlace de Trabadelo) y 420 (enlace de la Portela de Valcarce), situados en la provincia de León.
La actuación se ha coordinado con la Guardia Civil de Tráfico y con el Centro de Gestión de Tráfico del Noroeste de la Dirección General de Tráfico (DGT) para informar en los paneles de señalización variable a los usuarios.
Asimismo, son evaluadas las causas de los desprendimientos producidos con el objetivo de llevar a cabo las reparaciones que resulten precisas en el tramo afectado.
La Subdelegación del Gobierno en León recordó que este tramo de autovía entre Trabadelo y La Portela de Valcarce fue puesto en servicio en Julio de 2002.
GRIETAS EN EL TALUD
El pasado día 20 de febrero los servicios de conservación del Ministerio de Fomento detectaron algunas grietas en una parte de la coronación del gran talud existente en la margen derecha de la A-6, en su punto kilométrico 418 margen derecha.
El movimiento evolucionó durante la jornada del día 21, momento en que se procedió, por motivos de seguridad, al cierre de la A-6 en ambos sentidos de circulación y se implantó un desvío de la citada autovía entre los puntos kilométricos 415 y 420 a través de la N-VI.
Este desvío comenzó a funcionar antes de la noche del pasado día 21 de febrero, tras la decisión adoptada por el personal del Ministerio de Fomento y por la Guardia Civil de Tráfico, en coordinación con las delegaciones del Gobierno de Castilla y León y Galicia.
Según concretó, el tráfico en este desvío tiene una intensidad de 9.000 vehículos al día, un 27 por ciento de ellos, vehículos pesados.
El desvío habilitado a través de la N-VI funciona de manera correcta y los transportes especiales de mayor longitud han sido regulados por la Subdelegación del Gobierno en León y la DGT para que circulen en una franja horaria entre la 1,00 y las 5,00 horas, por lo que las incidencias para el tráfico serán "mínimas".
El talud afectado se construyó entre los años 1999 y 2002. Se trata del talud de mayor superficie y altura de toda la autovía del Noroeste, con una longitud de 600 metros, una altura máxima de 150 metros y una superficie aproximada de siete hectáreas.
El deslizamiento de ladera afecta a una superficie aproximada de tres hectáreas y se estima que ha movilizado unos 300.000 metros cúbicos.
La grieta superior está a unos 125 metros de altura respecto a la calzada de la A-6 y el pie de la rotura está por encima del muro de repié, lo que ha permitido que no estén afectados por el deslizamiento la calzada de la autovía ni el muro existente.
La parte afectada por el movimiento de ladera es la más occidental del talud y fue la que antes se construyó, entre los años 2000 y principios de 2001, ya que las partes central y oriental, que no fueron afectadas por el movimiento de la ladera, tuvieron un especial tratamiento durante la construcción con medidas de sostenimiento y drenaje, varios muros anclados y la construcción de un túnel artificial en su pie.
Finalmente, la Subdelegación del Gobierno señaló que desde la puesta en servicio en 2002 hasta febrero de 2009 no se habían producido incidencias en la explotación de este talud de la A-6.
