VALLADOLID, 28 Oct. (EUROPA PRESS) -
El sindicato CSIF en Castilla y León se mantiene expectante para comprobar si la consejera de Sanidad, Verónica Casado, cumplirá o no su promesa de mantener los 3.000 profesionales contratados actualmente a mayores para hacer frente a la pandemia de la Covid-19.
La incertidumbre expresada por dicha organización, a través de un comunicado recogido por Europa Press, obedece a que las gerencias territoriales no han recibido el miércoles indicaciones, ni están trasladando esta voluntad, cuando muchos contratos terminan durante este puente de los Santos.
CSIF reitera y urge la necesidad de que Sacyl mantenga esas contrataciones de refuerzo, "a las que hay que dar una mayor estabilidad temporal, no solo de uno o dos meses, con el objetivo de que las plazas que ocupan esos profesionales se añadan a plantilla orgánica de Sacyl, ya que la sanidad de Castilla y León, como venimos reivindicando desde hace antes de la pandemia, necesita más profesionales, tanto en el ámbito hospitalario como en Atención Primaria".
El sindicato independiente pide a la Consejería de Sanidad que la reordenación de la Atención Primaria, o la resolución de los concursos de traslados y de la adjudicación de las plazas de las recientes oposiciones (plazas que no son de nueva creación), no pueden ser una excusa para no seguir reforzando las plantillas, o para retener unos profesionales jóvenes que, en muchos casos, son recién licenciados, como ocurre en enfermería, que ahora se encuentran ante la decisión de continuar y asentarse en Castilla y León, o mancharse a otra Comunidad.
Entiende CSIF que Sacyl puede llevar a cabo esa reorganización y recolocación de profesionales porque son plazas conocidas que cambian de titular o dejan de ser temporales, al tiempo de reforzar y ampliar a mayores el personal del sistema sanitario público de la Comunidad, que está pidiendo más plantilla.
"Si parte de ese personal de refuerzo pasa ahora a plazas ya existentes, y no se mantiene ese refuerzo, a mayores, no habremos hecho nada", lamenta CSIF, que pide a la Junta que evite la fuga de profesionales sanitarios, "que ahora viven en la incertidumbre, y que Sacyl no termina de despejar, al tiempo que oyen cantos de sirenas desde otras comunidades autónomas".