Un detenido en Valladolid con 22 gramos de 'coca' asegura que dicha cantidad se la iba a esnifar en una semana

Actualizado: martes, 4 septiembre 2012 16:22

El fiscal solicita para él una pena de dos años y medio de cárcel por tráfico de drogas


VALLADOLID, 4 Sep. (EUROPA PRESS) -

Un hombre detenido en abril de 2011 en el Barrio de España de Valladolid en posesión de más de 22 gramos de cocaína, Juan Carlos L.G, ha negado hoy dedicarse al tráfico de sustancias estupefacientes y ha asegurado que la mercancía que le fue incautada tenía pensado esnifársela en tan sólo una semana, dada la grave adicción que sufría desde que contaba con 15 años.

Pese a ello, el fiscal ha mantenido su petición de pena para el procesado, en concreto dos años y medio de cárcel, aunque ha rebajado la multa de 2.000 a 1.500 euros, según informaron a Europa Press fuentes jurídicas.

El acusado, durante el juicio celebrado en la Audiencia de Valladolid, ha explicado que el día de autos, sobre las 17.15 horas del 14 de abril del pasado año, cuando circulaba en su vehículo por la calle Valle de Arán y fue interceptado por cuatro agentes del Grupo de Motos de Seguridad Ciudadana de la Policía Nacional, portaba una bolsa de cocaína que había adquirido para su autoconsumo tras abonar a su suministrador entre 800 y 900 euros, pero que según la policía podía haberse traducido en más de 120 dosis y alcanzar un valor próximo a los 1.700 euros.

Sobre su adicción, Juan Carlos L.G ha relatado que "había días que tiraba con dos gramos y otros en los que no lo hacía ni con cinco", aunque, tal y como ha sostenido, por aquel entonces entre su trabajo de encofrador y otras "chapuzas" aparte podía cobrar mensualmente cerca de 3.500 euros, cantidad con la que se costeaba una adicción contra la que hoy lucha en un programa de deshabituación en ACLAD. "Voy a ser papá, mi economía ha bajado mucho y ya no puedo permitirme ese lujo", ha añadido el imputado para justificar su decisión de dejar la cocaína.

INVESTIGADO AÑOS ATRÁS

Sin embargo, los agentes de la Policía Nacional que participaron en su detención han coincidido al señalar que el acusado no tenía actividad laboral conocida y han advertido de que éste y su entonces pareja, de origen colombiano, habían sido investigados años antes, sin éxito, como supuestos traficantes que actuaban en el Barrio de España, si bien las pesquisas se interrumpieron tras comprobar que ambos habían abandonado Valladolid.

En abril de 2011 Juan Carlos L.G, quien hoy cuenta con una nueva pareja, fue localizado de nuevo en la capital vallisoletana, de ahí que días después el Grupo de Estupefacientes solicitara el apoyo del Grupo de Motos para interceptar al turismo en el que viajaba el presunto traficante y comprobar si había "vuelto por sus fueros".

"En el momento de la detención se sacó un paquete de la cintura y lo escondió bajo su asiento", ha recordado uno de los policías, mientras que otros compañeros han precisado que tras su interceptación se procedió a registrar su domicilio, donde hallaron una balanza de precisión, dinero en billetes fraccionados, un gramo de cocaína y dos teléfonos móviles, uno de ellos de tarjeta, indicios todos ellos que, a juicio de los funcionarios policiales, avalarían su condición de traficante.