Ecologistas denuncian la destrucción de nidos de vencejos en las obras de restauración de la Muralla de Ávila

Actualizado: sábado, 8 agosto 2009 21:02

ÁVILA, 8 Ago. (EUROPA PRESS) -

Las organizaciones ecologistas SEO y Colectivo Cantueso-Ecologistas en Acción presentaron una denuncia ante la Guardia Civil con el fin de "intentar detener" al Ayuntamiento de Ávila en su "empeño por destruir" los nidos de vencejos en la Muralla con motivo de las obras de restauración que se llevan a cabo en el monumento.

Según indica la denuncia, las organizaciones manifiestan su "disconformidad" por la manera en que se están llevando a cabo dichas obras de restauración en relación con la afectación sobre las poblaciones orníticas "presentes y futuras asociadas a la Muralla", donde nidifican, entre otras especies, el vencejo común, especie catalogada de Interés Especial en el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas y "patrimonio natural de la ciudad".

Asimismo, indican que "una de las principales amenazas" de esta especie es la desaparición de sus lugares de nidificación como consecuencia de remodelación o derrumbamiento de las edificaciones utilizadas para nidificar.

Las obras de restauración de la Muralla, a su juicio, "no están teniendo en cuenta hasta el momento" la presencia de estas especies, "habiendo desaparecido su espacio de nidificación", y además "se están llevando a cabo en pleno periodo reproductor, contraviniendo todas las leyes de protección de las aves y la biodiversidad" como una directiva relativa a la conservación de las aves silvestres y la Ley del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad.

Según detallan en la denuncia, el Ayuntamiento no tiene en cuenta las recomendaciones de un informe de expertos que subraya la necesidad de realizar las tareas de mantenimiento y restauración fuera del periodo reproductor, "no trabajando en las obras entre los meses de abril a agosto ambos incluidos", por lo que la realización de estas obras "en plena temporada de cría ha ocasionado la pérdida de numerosos nidos".

Otras recomendaciones que no son tenidas en cuenta para "asegurar en su futuro las poblaciones de estas aves tan beneficiosas y sin repercusión para el patrimonio artístico de esta ciudad" son las de dejar cavidades en el interior de los muros con un volumen que oscile entre 1 y 2 decímetros cúbicos, abiertas al exterior mediante un orificio que debe tener unas dimensiones aproximadas de seis a diez centímetros de ancho y de tres a ocho de alto, distribuyendo estas cámaras preferentemente en las esquinas de encuentro entre lienzos y cubos, a más de dos metros del suelo y a más de uno de las almenas.

Por este motivo, piden la intervención en los trabajos de un técnico ambiental, su paralización hasta el final de agosto, dejar al menos 25 agujeros con las características y emplazamiento indicados en el informe técnico y que "se depuren las responsabilidades pertinentes por esta actuación contraria al derecho medioambiental".