VALLADOLID 6 Abr. (EUROPA PRESS) -
La secretaria de Estado de Empleo del Gobierno de la nación, Marí Luz Rodríguez, ha considerado este miércoles que la puerta de salida de la crisis, "que parece que está llegando a su final", debe ser "muy diferente" a la de entrada para lo que ha abogado por seguir el ejemplo y por asumir los valores que representan las empresas de la Economía Social.
En este sentido, Rodríguez se ha fijado el reto de aprovechar el actual debate sobre el modelo económico y productivo de futuro para España para, más allá de definir los nuevos sectores de la actividad productiva, poner sobre la mesa también los valores empresariales que hay que promocionar en los próximos años, desde el convencimiento de que la guía a seguir es la de la Economía Social.
"Al Gobierno le gustaría que esos valores no fueran otros diferentes a los de la Economía Social", ha insistido Rodríguez en su alocución durante la inauguración este miércoles en Valladolid del III Congreso Internacional de Investigación en Economía Social organizado por el CIRIEC.
En este sentido, ha reiterado su convencimiento de que extender a todo el mundo empresarial los valores que representa la Economía Social "es bueno para la economía, es bueno para la empresa y, sobre todo, es bueno para toda la sociedad".
La secretaria de Estado de Empleo ha trasladado también el "orgullo" del Gobierno de la nación por la aprobación en esta Legislatura de la Ley de Economía Social, una norma "pionera" que, según ha recordado, ha puesto a España a la cabeza de Europa en este tipo de normativa ya que ningún país de la UE tiene una ley sobre esta materia.
Según sus palabras, el Gobierno ha impulsado una Ley que se ha nutrido de las demandas históricas realizadas por parte de las distintas familias de la Economía Social, una forma de actuar que se ha comprometido a mantener en la fase de desarrollo legislativo de la norma. "El Gobierno le ha dado el impulso pero la madrina, la matriz ha venido del propio sector de la Economía Social que le ha puesto el cuerpo, le ha puesto la letra y le ha puesto también el espíritu", ha explicado.
RENTABILIDAD ECONÓMICA Y SOCIAL
Por otro lado, Mari Luz Rodríguez ha tomado prestado el lema del III Congreso Internacional de Investigación en Economía Social, 'la Economía Social pilar de un nuevo desarrollo sostenible', para refrendar las posibilidades de futuro de este sector. Así, ha destacado la capacidad de la Economía Social para combinar dos elementos esenciales, la eficiencia económica y los valores sociales, y ha reconocido que estas empresas tienen unas señas de identidad "muy valiosas" que no tienen otras al sumar la rentabilidad económica a la rentabilidad social.
Según sus datos, la Economía Social agrupa a más de 200.000 entidades en España con una facturación de más de 116.000 millones de euros en el último periodo, lo que representa el 10 por ciento del PIB nacional, y que dan trabajo, entre empleos directos e indirectos, a más de 2 millones de personas, el 10 por ciento del total de la población ocupada en España.
"Estos datos ponen bien en relieve el peso, el valor y la eficiencia económica de la Economía Social", ha manifestado Rodríguez, que crisis económica muy difícil, compleja a intensa y muy difícil de gobernar y la economía social ha demostrado que mientras las empresas capitalistas estaban perdiendo muy empleo en esta apenas ha perdido empleo y ha logrado resistir mejor por su capacidad de flexibilidad.
"Las empresas de Economía Social en esta crisis nos han dado a todos una lección de flexibilidad interna en su capacidad para seguir adelante sin destruir puestos de trabajo", ha admitido la secretaria de Estado de Empleo, para quien se trata de un ejemplo que "todos tenemos que aprender".
En ese aspecto de eficiencia económica, Rodríguez ha hecho especial hincapié en la capacidad de las empresas de Economía Social para generar empleo de calidad ya que el 80 por ciento de sus contratos son estables y dignifican la continuidad en los puestos de trabajo, otro ejemplo a seguir a su juicio.
Dicho esto, la secretaria de Estado de Empleo en el Gobierno de la nación ha significado los valores sociales de este tipo de empresas con especial atención a tres aspectos, la democratización en la gestión de la empresa, su compromiso firme con la igualdad de oportunidades de las personas que tienen un futuro más complicado y su compromiso con el desarrollo local y con el territorio.
ARRAIGO EN EL TERRITORIO
Así, ha recordado que la Economía Social no se deslocaliza sino que germina y se arraiga en el territorio con beneficios y efectos positivos tanto en lo económico como en lo social, "algo no habitual en otra clase de empresas que a veces llegan, y se agradece, pero luego se van", ha concluido.
En el mismo sentido se ha pronunciado, el vicepresidente de CEPES, Pedro Muñoz, quien, tras significar el nuevo marco normativo que se ha dado en España al sector de la Economía Social, ha recordado que estas empresas aportan un valor añadido a través de su compromiso con la sociedad al primar a la persona ante el capital.
Por este motivo, ha reclamado para estas empresas una mayor visibilidad en la sociedad.
El III Congreso Internacional de Investigación en Economía Social se desarrollará del 6 al 8 de abril en la Feria de Valladolid con el objetivo de analizar el papel que este sector puede desempeñar en un nuevo modelo de desarrollo sostenible. Reunirá en torno a 400 personas de 40 nacionalidades, fundamentalmente expertos universitarios en Economía Social, representantes de administraciones públicas, empresas y organizaciones del sector.
Los participantes del Congreso estudiarán la realidad y naturaleza actual de este actor socioeconómico, su capacidad y el modo en que está dando ya respuestas a los principales desafíos de las sociedades y economías del norte y del sur, los aliados sobre los que se puede apoyar para vertebrar una estrategia de largo alcance y el rol que desempeñan los poderes públicos en este proceso.
Este Congreso, de carácter científico internacional, reúne a investigadores y profesionales de la Economía Social de diferentes partes del mundo para intercambiar información y enfoques sobre la economía social. Pretende fomentar y, en lo posible, institucionalizar la investigación colaborativa y sistémica entre los investigadores, los gobiernos y los profesionales de la Economía Social e integrar, comparar y aumentar el conocimiento científico internacional sobre la economía social, orientándolo hacia una función proactiva de transformación del modelo de desarrollo económico.