VALLADOLID, 23 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Junta de Castilla y León propone ampliar las zonas y espacios de toma de muestras, inmovilización de animales domésticos que puedan sufrir la enfermedad y vacunación de especies que viven en zoos y en granjas de aves para aumentar el control sobre el posible contagio de la gripe aviar en animales. Esta es la posición que defiende hoy el director general de Producción Agropecuaria, Baudilio Fernández-Mardomingo, en la reunión del Comité Nacional del Sistema de Alerta Sanitaria Veterinaria que se celebra en Madrid con la presencia del Ministerio de Sanidad y de las comunidades autónomas.
El consejero de Agricultura y Ganadería, José Valín, avanzó la posición de la Junta en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, donde aclaró que no se adoptarán estas medidas de manera unilateral, en caso de que no sean recogidas, sino que se sumarán a los acuerdos que se tomen por la mayoría.
Valín trasmitió un mensaje de tranquilidad porque el posible contagio está ceñido a animales y se destaca que trasmute en personas y garantizó que no existe peligro en el consumo de aves porque antes pasan por los controles de la cadena alimentaria.
El consejero evitó concretar los espacios y humedales del ámbito regional en los que se podrían ampliar las muestras de animales, en este momento esos controles se ciñen a las lagunas de Las Navas (Palencia) y Villafáfila (Zamora), a la espera de si se acepta esa medida. Será la Comisión Interconsejerías de la Junta que se reúne mañana la que daría a conocer nuevas medidas.
Para la Junta es importante que se inmovilicen los animales de corral que puedan tener síntomas para evitar la propagación. También cree que se debe plantear la posibilidad de vacuar animales de los zoológicos y las aves de gran tamaño que se crian en granjas, caso de patos.
"Castilla y León asumirá las decisiones que se tomen con carácter mayoritario, lo conveniente es seguir el criterio general que se adopte para toda España", argumentó Valín, que añadió que Castilla y León no se encuentra entre las comunidades de mayor riesgo. El Comité Nacional del Sistema de Alerta Sanitaria Veterinaria aborda hoy el encierro de aves domésticas, tal y como han hecho ya algunos países comunitarios con el fin de evitar que estén en contacto con otras silvestres, especialmente las migratorias, que puedan ser portadoras del virus de la gripe aviar.
El Gobierno tiene previsto, además de las medidas de vigilancia, seguimiento de la enfermedad y mayor control en los puestos fronterizos, el análisis de 16.500 muestras correspondientes a aves de producción y 3.600 a silvestres.