Advertencia de la Policía Nacional sobre las consecuencias de presentar una denuncia falsa. - SUBDELEGACIÓN DEL GOBIERNO
MIRANDA DE EBRO (BURGOS), 11 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Policía Nacional de Miranda de Ebro (Burgos) ha investigado a una madre y su hijo que pretendían estafar a su compañía aseguradora mediante la simulación del robo de una chaqueta de 300 euros y la rotura de un teléfono móvil.
Los hechos se remontan al pasado mes de febrero, cuando un varón de 25 años acudió a la Comisaría de Policía Nacional de Miranda de Ebro para denunciar que, después de haber estado alternando por la noche en un local de ocio de dicha localidad, dos varones le habían abordado para sustraerle una cazadora, valorada en 300 euros, y le habían causado también daños en su teléfono móvil, así como unas supuestas lesiones.
Agentes de la Comisaría de Policía Nacional comenzaron la investigación para poder identificar a los autores del supuesto robo con violencia, han informado a Europa Press fuentes de la Subdelegación del Gobierno.
Tras realizar las primeras diligencias, los agentes comenzaron a detectar incongruencias entre lo manifestado por el denunciante y los hechos que realmente habían ocurrido.
Debido a estas incoherencias, los agentes citaron de nuevo a declarar al denunciante, que acudió en esta ocasión con su madre para reafirmarse en la denuncia que en un primer momento había interpuesto su hijo, para lo que aportó nuevos argumentos para intentar dar mayor veracidad a los hechos.
NUEVA CITACIÓN
Ante las evidencias de que la situación denunciada no se correspondía con la realidad, madre e hijo fueron citados a declarar de nuevo, en esta ocasión como investigados por una presunta simulación de delito.
Ya en Comisaría, madre e hijo confesaron que habían mentido y que era falso que el denunciante hubiese sido víctima de un robo con violencia, sino que su intención era presentar una denuncia falsa para reclamar a su compañía aseguradora una compensación por la supuesta sustracción de la cazadora y la reparación del teléfono móvil que presentaba unos daños no producidos por un hecho delictivo. En total, la cantidad económica que pretendían estafar al seguro ascendía a 463 euros.
La Policía Nacional ha recordado que todas las denuncias que se reciben son investigadas y que la simulación de delitos o la presentación de una denuncia falsa para posteriormente solicitar una compensación económica a una compañía aseguradora, acarrea responsabilidades penales.