SEGOVIA, 30 Ene. (EUROPA PRESS) -
Irene Escolar (Madrid, 1988), conocida por su papel de Juana la Loca en la serie de TVE 'Isabel' y nominada al Goya como actriz revelación por 'Un otoño sin Berlín', asegura que afronta su trabajo con la simple aspiración de ser feliz día a día, sin grandes ambiciones, asumiendo siempre que la profesión, a la que llegó de niña, tiene muchos riesgos y puede hacer a los artistas "pasarlo muy mal".
"Vivo en una familia que se dedica a esto y he visto en casa que esta es una profesión muy dura y que el éxito, como decía Roberto Bolaños, es un accidente y no un valor. El valor es defender tu función todos los días. Yo he sabido refugiarme muy bien en no querer alcanzar grandes metas", señala.
La actriz, perteneciente a una saga de artistas de larga trayectoria en la escena --es nieta de Irene Gutiérrez Caba y sobrina nieta de Emilio y Julia Gutiérrez Caba--, precisa que de su familia ha aprendido a relativizar el oficio y a ser templada. Sus tíos, dice, son felices defendiendo su trabajo día a día, sin aspirar a más, y el hecho de no tener grandes metas les ha permitido no tener grandes frustraciones.
Escolar reconoce que, pese a los riesgos, la interpretación encierra una magia que, cuando a uno le dan la posibilidad de trabajar, "lo compensa todo".