VALLADOLID, 21 Abr. (EUROPA PRESS) -
Valladolid ha vuelto a homenajear este jueves en su casa de la calle Rastro a su ilustre vecino Miguel de Cervantes, con motivo de la proximidad del aniversario de su fallecimiento y del Día del Libro, así como a su ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha y su "cuerda locura", un evento que ha vuelto a su formato habitual tras la pandemia y en el que el alcalaíno ha cedido parte del protagonismo a Antonio de Nebrija en el V centenario de su fallecimiento.
El acto ha estado presidido por el alcalde de Valladolid, Óscar Puente, acompañado de los vicepresidentes de la Diputación Víctor Alonso y Gema Gómez, representantes de los distintos grupos políticos municipales y provinciales, mandos militares y de la Policía Nacional, representantes del mundo de la cultura, así como por el cardenal arzobispo de Valladolid, Ricardo Blázquez.
Ante un nutrido grupo de personas reunidas en los jardines de la casa que Miguel de Cervantes ocupó durante su residencia en Valladolid cuando ésta acogió la corte del rey Felipe III a comienzos del siglo XVII, el director en funciones del museo que hoy se alberga en sus muros, Alberto Campano, ha centrado su intervención en "la naturaleza del héroe" que el autor del Quijote abordó en su célebre obra y que plasmó con una "dualidad entre el heroísmo y las chanzas".
Una obra "tan leída y consultada casi como la Biblia" y que supone "una referencia como ella", como ha destacado Campano, quien ha tomado el relevo, al frente de este "sexagenario y consuetudinario acto demasiadas veces interrumpido", de la anterior directora de la Casa Museo, María Bolaños, quien se jubiló a finales de 2021 pero que a pesar de lo cual no ha faltado a la cita con Miguel de Cervantes, en esta ocasión como espectadora.
Campano ha citado a Miguel de Unamuno en su 'Vida de Don Quijote y Sancho' para glosar al caballero de la triste figura, el cual "llenó la fantasía de hermosos desatinos". "Perdió el juicio, por nuestro bien", ha añadido el director en funciones de la casa, que se referido a este "hidalgo pobre que no se dio al mundo hasta la madurez" merced, entre otras cosas, a una combinación de "pobreza y ociosidad". "Nada hay más ingenioso que pobreza y ociosidad", ha apostillado antes de sentenciar que el Quijote "no buscó provecho pasajero", sino "eterno nombre y fama".
"LARGA VIDA AL LIBRO"
Por su parte, el alcalde ha deseado una "larga vida" al libro y ha recordado que "todo lo que tiene de esencial lo tiene de vulnerable". "La lectura nos conservará libres", ha defendido el primer edil.
El alcalde ha reflexionado sobre la aportación del libro tanto a título individual como en el conjunto de la sociedad y ha invocado la responsabilidad social para defender el papel de los libros, citando para ello a otro gran clásico de la literatura universal, el italiano Francesco Petrarca.
Puente también se ha referido, en este homenaje a Cervantes, a otra gran figura fundamental de las letras en castellano como es el sevillano Antonio de Nebrija, autor de la primera gramática, de cuyo fallecimiento se cumplen cinco siglos este 2022.
Tras los discursos de Puente y Campano, el acto --en el que la Corporación municipal ha lucido sus medallas de gala escoltada por dos maceros y el alcalde ha portado el simbólico bastón de mando--, la técnico de la Casa Museo Rocío Ruiz Vara ha leído el prólogo del Quijote para mostrar a un Miguel de Cervantes huidizo de las tendencias del momento entre los escritores, amigo de llenar sus páginas con alusiones a los grandes clásicos de la literatura, muy crítico con los libros de caballería a los que trató de ajusticiar con su novela y enemigo de alabanzas estériles como si su libro se tratara de "un hijo feo" al que adular, algo que pide al lector desterrar pues "ni es pariente, ni su amigo".
