Agro.- La CE defiende autorizar el vino rosado de mezcla para que los productores europeos "no queden en desventaja"

Actualizado: viernes, 24 abril 2009 19:14

LUXEMBURGO, 24 Abr. (EUROPA PRESS) -

La comisaria de Agricultura, Mariann Fischer Boel, insistió hoy en su defensa de permitir en la Unión Europea el 'coupage' para el vino rosado --práctica que permite obtener este caldo a partir de la mezcla de tinto y blanco-- porque se trata de una técnica autorizada por la Organización Internacional del Vino y de la Vid (OIV) y porque, de lo contrario, los productores europeos quedarían "en desventaja" ante competidores extracomunitarios.

Hasta ahora, la Unión Europea prohíbe mezclar tintos y blancos para producir rosado de mesa -sí está permitido para otras calidades como los de denominación-, pero se permite la importación de este tipo de caldos procedentes de países terceros. Una derogación permitió a España hasta 2004 producir vino rosado de mesa por la técnica del 'coupage'.

La OIV sí permite esta práctica para los vinos de mesa y Bruselas prepara una nueva normativa para adaptarse a estas reglas internacionales, que ha despertado las reticencias de algunos productores, especialmente franceses.

Precisamente este viernes, el ministro de Agricultura francés, Michel Barnier, regaló a sus colegas y a la comisaria unas botellas de vino rosado de su país elaborado con las técnicas tradicionales.

Expertos de los 27 aprobaron el pasado mes una propuesta de etiquetado voluntario que diferenciará el vino rosado 'tradicional' del de 'mezcla' con la que se pretende salvar estas reticencias

Las votaciones definitivas en cuanto al etiquetado voluntario y al nuevo reglamento enológico están previstas para el próximo 19 de junio y, según indicaron fuentes comunitarias, en ambos casos Bruselas confía en un resultado positivo. "Las dos votaciones indicativas que ha habido hasta ahora han sido favorables", explicaron.

La comisaria Fischer Boel recalcó hoy que "sería una pena" que los productores europeos no pudieran competir con este tipo de producto a pesar de que está autorizado por la organización internacional.

También admitió que representantes del sector vitivinícola galo le han transmitido su desacuerdo con el etiquetado propuesto porque consideran que el apelativo 'tradicional' equivale a antiguo y "no se corresponde a la imagen moderna" del vino rosado. Por ello se comprometió a "buscar soluciones" que satisfagan a todas las partes.