La fecha del referéndum enfrenta el Gobierno de Andorra con los contrarios al acuerdo con la UE

El Ejecutivo andorrano defiende celebrarlo después de que el acuerdo se vote en el Parlamento Europeo

ANDORRA LA VELLA (ANDORRA), 3 (EUROPA PRESS)

La fecha escogida para celebrar el referéndum sobre el acuerdo de asociación de Andorra con la Unión Europea (UE) ha enfrentado este jueves al Gobierno con los partidos de la oposición contrarios al acuerdo.

La cuestión ha sido una de las que ha protagonizado la comparecencia del secretario de Estado para las Relaciones con la UE, Landry Riba, ante la comisión legislativa de Política Exterior del Consell General (Parlamento andorrano).

Los presidentes de los grupos parlamentarios de Concòrdia y Andorra Endavant, Cerni Escalé y Carine Montaner respectivamente, han pedido que el referéndum se celebre antes de que el texto sea votado en el Parlamento Europeo para evitar el impacto reputacional que, a su juicio, podría tener un resultado negativo en la consulta.

Riba ha recordado que el planteamiento del Gobierno es celebrar la consulta después de que se vote en el Parlamento Europeo al considerar que es más "ordenado y sensato" tomar la decisión cuando todas las cuestiones pendientes estén resueltas.

Con independencia del resultado del referéndum, ha manifestado que el trámite en el Parlamento Europeo debe hacerse sí o sí, por lo que un resultado negativo no supone "ningún mal trance" para la institución europea.

Igualmente, ha indicado que todas las instituciones implicadas son conscientes de la decisión de Andorra de celebrar un referéndum y entienden el resultado que puede darse, por lo que considera que "el riesgo reputacional no existe".

"RIDÍCULO INTERNACIONAL"

Para Montaner, es un error que los andorranos voten después de la decisión del Parlamento Europeo, tras asegurar que un 'no' al acuerdo cuando las instituciones europeas ya lo hayan aprobado sería hacer "un ridículo internacional".

Escalé también considera que esperar a la decisión del Parlamento Europeo supone "una especie de chantaje" hacia la ciudadanía porque, a su parecer, es más complicado emitir un voto negativo cuando todas las instituciones ya se han posicionado favorablemente.

Finalmente, Riba ha recordado que, si finalmente el acuerdo es declarado de naturaleza mixta, la legislación actual del país no permite una aplicación provisional, por lo que un resultado del referéndum positivo requeriría un cambio legislativo.