LLEIDA, 9 Ene. (EUROPA PRESS) -
Lleida tendrá una escuela de pastores en el Pallars Sobirà en la que sus alumnos podrán aprender el oficio en una de las casi trescientas explotaciones ganaderas de la comarca. La escuela forma parte del proyecto Gripia, que pretende garantizar el relevo generacional en el sector.
El nuevo centro está impulsado por la empresa Montanyanes de Sort, la Diputación de Lleida y la Generalitat a través de las consellerias de Agricultura, Alimentación y Acción Rural (DAR), de Trabajo y el Parque Nacional de Aigüestortes i Estany de Sant Maurici y El Institut de Desenvolupament i Promoció de l'Alt Pirineu i Aran (Idapa).
El proyecto, además de la escuela, contempla la creación de un banco de tierras, asesoría técnica a las explotaciones, la comercialización de productos, como la lana y la carne, y la sensibilización a los jóvenes.
"Se trata de que un agricultor o ganadero pueda decir a la gente sin complejos que lo es y que si se lo gestiona bien puede tener vacaciones", afirmó hoy la coordinadora de la explotación, Vanesa Freixes, para quien este año servirá para poner las bases de un proyecto en el que trabajarán seis técnicos y por el que ya se están interesando algunas personas.
Freixes presentó el proyecto en la Diputación de Lleida acompañada del presidente, Jaume Gilabert, que anunció que la Corporación pondrá a disposición de la iniciativa la finca del Bon Repòs para difundir el proyecto aprovechando que desde hace cinco años en la finca se trabaja con la Asociación de la Vaca Bruna.
La escuela de pastores del Pallars Sobirà partirá del modelo de la escuela de pastores de Asturias. La formación estará tutelada por la Escuela de Capacitación Agraria del Pallars --situada en Talarn--, que velará por que los alumnos reciban formación en las explotaciones que estén interesadas a cambio de manutención y alojamiento.
Esta escuela será la primera de pastores de Catalunya. En una fase más incipiente hay un proyecto de otra escuela que impulsan el Vallès Oriental y un grupo de Cardedeu.
No es la primera experiencia de Montanyanes con el Parque Nacional de Aigüestortes i Estany de Sant Maurici y el Idapa para recuperar la actividad ganadera. Desde octubre de 2007 ha organizado varios cursos con artesanos de la zona con el objetivo de dar más valor a la oveja de raza xisqueta, de manera que los ganaderos cobren un precio justo por la lana que puede utilizarse en trabajos artesanales y en la construcción como aislante.
